Organismos empresariales, agrícolas, ganaderos y de sociedad civil emitieron un pronunciamiento conjunto en el que denunciaron la persistencia de presuntas extorsiones y cobros ilegales atribuidos a operadores vinculados con la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), organización cuyo secretario general es el diputado de Morena Pedro Haces, y a grupos del crimen organizado.
Esto ocurre a poco más de dos semanas de las protestas simultáneas encabezadas por transportistas y agricultores en la Comarca Lagunera, quienes han denunciado “extorsiones sistemáticas disfrazadas de cuotas sindicales”, lo que ha sido negado por la organización, que acusa una campaña negra en su contra.
La declaración, difundida el miércoles, fue firmada por la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), el Consejo Lagunero de la Iniciativa Privada (CLIP), la Coparmex Laguna, el Consejo Cívico de las Instituciones, la Unión Ganadera Regional de la Laguna, entre otras, quienes aseguraron que “los sectores productivos de la Comarca Lagunera de Durango no aguantan más”.
Entre los afectados se enlistan campesinos, ganaderos, comerciantes, avicultores, agricultores, transportistas, prestadores de servicios y trabajadores independientes. De acuerdo con el documento, en la región se ha “institucionalizado” el cobro de piso disfrazado de cuotas sindicales, con amenazas, agresiones y represalias contra quienes se niegan a pagar.
Las organizaciones señalan prácticas como cuotas por transporte de materiales de construcción, cobros por movilización de ganado, control forzado en el comercio de silo y alfalfa, apropiación ilegal de obras públicas y privadas, además de intimidaciones a pequeños comerciantes y restauranteros.
También denunciaron el control exclusivo de la venta de pollinaza, desvío ilegal de agua con cobros de hasta 20 mil pesos por hectárea, así como la imposición en el manejo de módulos de riego. Incluso, advirtieron sobre extorsiones en retenes de alcoholímetro con presunta participación de grupos delictivos.
El pronunciamiento advierte que la impunidad es el principal factor que permite la continuidad de estas prácticas y exigió al gobierno federal una intervención inmediata. En particular, hicieron un llamado a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y al secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, para que se emprenda una investigación amplia sobre los presuntos vínculos de la CATEM con el crimen organizado, además de brindar protección a las víctimas y sancionar a las autoridades negligentes o cómplices.
Los organismos firmantes acusaron que la CATEM en La Laguna ha desviado sus funciones legítimas hacia actividades económicas ajenas a su naturaleza sindical, operando con prácticas monopólicas e intimidatorias. Señalaron además que el sindicato cuenta con cuerpos de seguridad armados que rebasan las atribuciones legales.
Lo anterior está ocurriendo en la región de la comarca lagunera, pero la CATEM tiene influencia en todo el país, incluyendo Morelos. En nuestra entidad la CATEM está representada por Ricardo Morales Wright, un empresario de medio pelo que por azares del destino se vio convertido en líder sindical y que para cumplirle a Pedro Haces se ha rodeado de los que anteriormente estaban en la Confederación de Trabajadores de México (CTM) como Roberto Castrejón y Héctor Suárez. El polémico Eduardo Becerra Pérez, que fue muy poderoso en el sexenio de su socio y amigo Sergio Estrada Cajigal, ahora está representando el papel de “obrero” cuando nunca en su vida ha sido empleado.
Afortunadamente hasta el momento la CATEM-Morelos ha asumido como estrategia el diálogo y la conciliación, no como sus homólogos de Durango que ha optado por la confrontación, y eso habla bien de ellos.
En la historia del sindicalismo ha habido episodios en los que las peleas por los contratos colectivos de trabajo han desencadenado en balaceras (como aquella que terminó con la vida de Huber Nájera, padre de la actual lideresa Vianey Nájera). También no olvidemos —aunque muchos quisieran que ya no se hablara de ello— que el líder de los albañiles, Tito Barrera Ocampo, fue acribillado a balazos hace más de una década, y que Jesús García Rodríguez (el que asesinaron en pleno zócalo en mayo de 2019) era representante de la Sección 51 de la CTM, entre otras facetas.
Casi nadie lo supo, pero el que era representante en Morelos del Sindicato Libertad, Luis Manuel Rodríguez, fue asesinado el año pasado.
Por eso es alentador ver que las organizaciones sindicales se llevan muy bien. Ayer, el Nuevo Grupo Sindical (NGS) difundió en su muro de Facebook una fotografía en la que aparece el heredero de la organización, Ben Hur Hernández Bringas, con funcionarios del gobierno estatal y municipal de Cuernavaca y el siguiente mensaje:
“La Federación Nuevo Grupo Sindical agradece la invitación del Gobierno del Estado de Morelos, así como el Ayuntamiento de Cuernavaca para participar con los Compañeros Comerciantes en las FIESTAS PATRIAS 2025”. No pone el nombre de Ricardo Morales Wright (que aparece en la foto) lo que hubiese sido una muestra de diplomacia, pero este muchacho no sabe lo que es eso.
Aunque no hubo boletín oficial, la foto dice mucho más que mil palabras: Ya se repartieron el centro histórico para la vendimia el próximo 15 y 16 de septiembre.
Y si algo hemos admirado del Nuevo Grupo Sindical, es su capacidad de adaptación política. A Don Bulmaro Hernández lo hemos visto levantarle la mano a gobernantes priístas, panistas, perredistas, y ahora lo vimos muy pegado a la gobernadora Margarita González Saravia en el evento del pasado domingo en Jardines de México, lo suficientemente cerca para salir en todas las fotos.
HASTA MAÑANA.