Si la Fiscalía General del Estado (FGE) es una institución fundamental para el funcionamiento de un gobierno, la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), es una pieza clave para mover los hilos de un estado. Al menos así lo demostró el último titular de dicha dependencia, el polémico Juan Jesús Salazar Núñez.
A lo largo de casi 10 años al frente de la FECC, Salazar Núñez y su fiel escudero, Edgar Núñez Urquiza, han protagonizado todo tipo de escenas de lo más controversiales, desde hacer un espectacular despliegue policiaco para entregar un citatorio al entonces secretario de Gobierno, Pablo Ojeda Cárdenas; irrumpir en la Tesorería del Ayuntamiento de Cuernavaca en busca de documentos; hostigar a la entonces auditora del Congreso, América López; tomar por asalto la Notaría de Alejandro Gómez Maldonado; hasta atrincherarse en las instalaciones de la FECC para impedir que entrara el fiscal antisecuestros Luis Flores, enviado por el fiscal general Uriel Carmona.
Como olvidar su “renuncia voluntariamente a fuerzas” presentada al encargado de despacho de la FGE, Carlos Montes, para luego ir a solicitar apoyo al Congreso Local donde también intentó que lo nombraran magistrado del Tribunal Superior de Justicia a cambio de favores.
O la última: la escena transmitida en vivo por Facebook con un agitado vicefiscal llegando al Salón de Plenos del TSJ con policías portando armas largas para tratar de impedir que se consumara el delito de “Coalición de Servidores Públicos” por parte de 11 magistrados que ya habían destituido al presidente Jorge Gamboa.
Hasta para mandar aclaraciones a medios de comunicación Juan Salazar era diferente. En marzo de 2019, promovió un recurso de Derecho de Réplica ante un Juez de Distrito para pedir a La Unión de Morelos que publicara una simple carta aclaratoria.
Ahora bien, ¿por qué Juan Salazar duró tanto tiempo al frente de la FECC?
Les explico: en los tiempos en que los diputados locales hacían lo que les dijera el gobernador Graco Ramírez, primero quiso que la Fiscalía Anticorrupción fuera totalmente autónoma, para lo cual mandó una iniciativa de reforma al artículo 40 de la Constitución para crear la figura del Fiscal Especializada en Combate a la Corrupción, estableciendo que dicho funcionario sería designado por el Congreso Local de una terna enviada por el Ejecutivo. Así, con fecha 28 de agosto de 2015, con 22 de 30 votos, fue designado el que fuera su consejero jurídico y militante del PRD, Juan Salazar Núñez por un periodo de tres años. De relleno, iban Paulina Toledo y Helio Brito.
Sin embargo, luego cambió de parecer y mandó cambiar la constitución y consideró que era mucho riesgo, pues la Cámara de Diputados podía caer en manos de la oposición y que esta designara un fiscal anticorrupción que lo persiguiera, así que el 15 de febrero de 2018 se publicó la reforma constitucional que rige hasta la fecha, y que establece que “la Fiscalía General se integrará con la estructura que establezca su Ley Orgánica, y con una Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, cuyo titular será designado por el Fiscal General”.
Para ese momento el Congreso leal a Graco ya había designado al notario Uriel Carmona como titular de la Fiscalía General, así que -casi en automático- le dio un nuevo nombramiento a Juan Salazar Núñez por otros siete años.
De esta manera Graco Ramírez “se blindó” de cualquier intento de procesarlo por algún delito cometido durante su mandato como gobernador, y lo redondeó con la designación del presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, el también notario con licencia, Raúl Hernández Cruz.
Así, a pesar de que el gobierno de Cuauhtémoc Blanco presentó decenas de denuncias ante la FECC, las carpetas de investigación se tardaron una eternidad en ser judicializadas. Hace apenas unas semanas un grupo de ex funcionarios de la administración de Graco Ramírez fue vinculado a proceso por algunas de las denuncias presentadas ¡hace seis años!, pero ninguno pisará la cárcel, sino que llevarán sus procesos en libertad. En todas ellas, la responsabilidad llega hasta el secretario del ramo, pero en ninguna se menciona siquiera al exgobernador.
La única que se mantiene viva es una carpeta iniciada por el Instituto de Crédito para los Trabajadores al Servicio del Estado por la adquisición de una camioneta por parte de Graco Ramírez unos días antes de dejar el cargo. Ese asunto le ha servido a la Fiscalía Anticorrupción para argumentar que no se le ha protegido a Graco, pues a pesar de que ya se pagó el crédito y todos los co-acusados ya han sido exonerados, la FECC ha mantenido abierta la investigación mediante argucias legales.
Por otra parte, quienes hemos seguido de cerca las audiencias en las que la Fiscalía Anticorrupción ha sido parte acusadora, nos hemos percatado de la diferencia de trato en determinados asuntos. Juan Salazar ha venido aplicando la máxima que dice: “A los amigos justicia y gracia; y a los enemigos la ley a secas”.
Los encargados de aplicar esa justicia diferenciada han sido los vicefiscales, Edgar Núñez Urquiza y Zeus Gutiérrez, que son quienes acuden personalmente a las audiencias orales y en ocasiones parecen fieras y en otras se muestran condescendientes con el presunto delincuente, lo que ha generado rumores (e incluso denuncias formales) en el sentido de que la FECC “vende la justicia” al mejor postor.
Sin embargo, hay que reconocer que tanto Edgar como Zeus son los que mejor manejan el sistema acusatorio, así que será interesante ver si el nuevo titular, Leonel Díaz Rogel, hace cambios inmediatos o los mantiene en el cargo.
GALARDÓN INTERNACIONAL PARA TLALTIZAPÁN. - Con el objetivo de posicionar a Tlaltizapán de Zapata como un destino clave en el mapa turístico nacional, la presidenta municipal Nancy Gómez Flores diseñó y encabezó la estrategia institucional con la que el municipio participó en el Tianguis Turístico México 2025, celebrado en Baja California.
A través de la Dirección General de Fomento al Desarrollo Económico, y la dirección de Turismo, a cargo de Anayanci Ocampo Tovar, se atendieron más de 50 citas de negocios con compradores nacionales e internacionales, enfocadas en consolidar a Tlaltizapán como un destino cultural con identidad propia.
En este mismo marco, el municipio fue galardonado a nivel internacional por la conservación del Carnaval del Pueblo, celebración que recientemente cumplió 104 años de historia. El reconocimiento fue otorgado por la revista española “AireLibre”, especializada en turismo y con una audiencia superior a los 850 mil lectores.
HASTA MAÑANA.