La organización México Evalúa señaló que esta población es la que más gasto realiza para su atención médica, debido a fallas en el sistema de salud pública.
Los adultos mayores son el estrato de la población que más aumentó su gasto en salud, según reveló la organización México Evalúa, con base en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2024, publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) esta semana.
En su análisis titulado “Situación del gasto en salud de los hogares en México 2018 vs. 2024”, la organización civil destaca que el gasto en este rubro de los hogares mexicanos se ha incrementado de manera sostenida en los últimos seis años, generando mayor presión financiera, particularmente entre los sectores más vulnerables.
Los adultos mayores son el grupo que enfrenta mayor vulnerabilidad, según México Evalúa, pues tuvieron el incremento más elevado entre 2018 y 2024, al pasar de una erogación de mil 567 a dos mil 285 pesos trimestrales por hogar, lo que representa un aumento de 718 pesos, es decir, un alza de 46%.
Los hogares sin seguridad social, que principalmente están compuestos por trabajadores independientes y son la población objetivo que atendería el IMSS-Bienestar, son los que más gastan en salud, pues destinan el 2.7 por ciento de su ingreso, en contraste con quienes cuentan con seguridad social, que destinan entre el 1 y el 2 por ciento.
Un dato adicional que aporta México Evalúa es el del empobrecimiento por razones médicas. Refiere que cerca de 284 mil hogares mexicanos cayeron en pobreza como resultado directo del gasto en salud, lo que representaría un aumento del 60% respecto a 2018.
“El análisis de México Evalúa advierte que estas tendencias reflejan una creciente vulnerabilidad de los hogares frente al debilitamiento del sistema público de salud y subraya la necesidad urgente de políticas públicas que garanticen el acceso efectivo, equitativo y gratuito a los servicios de salud”, señala el trabajo.
Sobre el mismo tema, el Instituto Mexicano para la Competitividad señaló que el gasto en salud de los hogares mexicanos refleja carencias estructurales y brechas en la garantía del acceso a este derecho.
Y concluyó diciendo que en 2024, el 71 por ciento de la población reportó estar afiliada o tener acceso a algún servicio médico, pero se mantiene por debajo de la cifra que se presentaba en el año 2016, que era del 82.6%.
“La disminución en la cobertura de servicios públicos ha generado una mayor presión sobre los hogares para financiar su atención médica con recursos propios. Esta situación se traduce en un aumento del gasto de bolsillo, especialmente en estados con menor cobertura y calidad en los servicios públicos de salud”, subraya el IMCO.
Los estados que destinaron una mayor proporción de su gasto a cuidados de la salud son Oaxaca, Zacatecas y Guerrero.