El intenso color amarillo y el aroma inconfundible del cempasúchil llenan el Vivero Ornamentales Serrano, en la colonia Los Pilares de Jojutla.
Como cada año, las manos trabajadoras de sus productores dan vida a esta bella y emblemática flor que adorna los altares y ofrendas durante los días de muertos.
Angélica Peralta, productora del vivero, explicó en entrevista para La Unión que una de las variedades más destacadas es el marigold, conocida también como “bola” o “bombom”, una flor grande, redonda y de intenso color amarillo.
Esta variedad, típica del cempasúchil para Día de Muertos, es especialmente apreciada por su tamaño, forma esférica y su aroma.

Además de esa variedad, el vivero ofrece el clemolito, una flor de tamaño mediano con sus pétalos que mezclan dos tonos, amarillo y naranja.
La siembra del cempasúchil inicia varios meses antes de la temporada, aproximadamente en agosto. Los productores dedican tiempo, cuidado y esfuerzo para garantizar plantas fuertes y saludables.
Durante la época de lluvias, los productores implementan medidas especiales para prevenir el hongo de la cenicilla, garantizando que el cempasúchil florezca sano y llegue a los altares y ofrendas en su mejor estado.
“De agosto hasta estas fechas tenemos la flor, entonces el ver como la planta va creciendo día a día, se va viendo un avance, a veces llegaba y veía ya anaranjadito y es una emoción bien bonita. Si les agarramos cariño a las plantas”, señaló Peralta.
Los productores invitan a las familias a visitar el vivero y elegir sus plantas para llenar de color, aroma y vida sus altares, manteniendo viva la tradición del Día de Muertos.
Para conocer más sobre el trabajo de los productores y ver de cerca el cultivo del cempasúchil, te invitamos a ver la entrevista completa en nuestro video de YouTube.
