El director de educación elemental Bernardino Pliego y Pliego informó que ya se han llevado a cabo reuniones con directores de los distintos niveles educativos y se les ha informado sobre la normatividad que establece que no tienen por qué coartar el derecho a la educación a los niños y en los casos donde hay mucha demanda, que se oriente a los padres de familia a que vayan a las supervisores escolares para que se les canalice a otros centros educativos cercanos a su domicilio. Y es que aseguró que existe capacidad para atender al 100 por ciento de la población en edad de estudiar preescolar, primaria y secundaria.

Informó que ya se giraron oficios en los que se advierte que los directivos y maestros no deben participar en la solicitud de cuotas económicas voluntarias. Aclaró que los comités de padres de familia sí tienen la facultad de solicitar las aportaciones que deben ser voluntarias y que se deberán de establecer, conforme a un análisis detallado, las necesidades de las escuelas y una vez que se determinen cuáles son los requerimientos, estudiar junto con los directores de los centros educativos cuáles de esas necesidades son posibles de cubrir con la ayuda de los padres de familia.

Pliego y Pliego estimó que se habrán de inscribir para este ciclo escolar cerca de 400 mil alumnos de educación básica, de los cuales alrededor de 340 mil en escuelas públicas, desde inicial, hasta normales, y el resto en privadas.

En el registro de escuelas secundarias se estima que se habrán de inscribir poco más de 85 mil alumnos.

Entre los documentos que se solicitan se encuentran el acta de nacimiento y la CURP, pero se ha recomendado a los directivos que si en la escuela ya se cuenta con estos documentos, que se les ahorre a los padres esas copias para simplificar el proceso y evitar gastos adicionales.

Apuntó que si se diera el caso de condicionamiento de inscripciones al pago, podrían denunciar los padres de familia ante el IEBEM.