Francisco Rodríguez Guerrero fue liberado ayer mismo, pero la juez Leticia Damián Avilés le advirtió que era porque sólo existía el señalamiento del propietario del automóvil en su contra, pero dejó abierta la posibilidad de que el Ministerio Público continúe la investigación y solicite una orden de aprehensión en su contra.

El imputado dijo que procedería legalmente en contra del jefe de seguridad interna del Congreso local, José Crespo Meléndez, porque éste, junto con otras dos personas, más le provocaron lesiones que según el médico legista que lo examinó tardan en sanar más de 15 días.

Los hechos se presentaron el pasado 16 de febrero por la noche, cuando el funcionario del Congreso del Estado se encontraba en su casa y escuchó que su automóvil, estacionado en una calle de la colonia Ciudad Chapultepec, era arrancado.

El hombre salió y vio como otra persona se llevaba su auto, así que salió en su persecución, pero no le dio alcance, así que regresó a su casa, pero observó que nuevamente el carro circulaba cerca de su vivienda, por lo que nuevamente fue tras el ladrón, en esta ocasión en compañía de dos personas más a bordo de una camioneta.

Según la declaración que Crespo Meléndez rindió ante el ministerio público, le dieron alcance al responsable en la tienda el Oxxo de la colonia Tulipanes, pero el hombre se opuso al arresto.

La juez consideró que hubo errores en el procedimiento porque al lugar de los hechos llegó la Policía para hacerse cargo del detenido, pero no se entrevistó con las personas que se encargaron de la aprehensión.

“No basta la simple imputación para presumir que el presentado es el responsable del delito. Sé que el ministerio público tiene sólo 48 horas para recabar pruebas, pero la prueba indirecta tuvo que ser acompañada por otras periciales para soportar el dicho del señor Crespo Meléndez”, consideró la juez del caso.

En la misma audiencia, el detenido rindió su declaración de los hechos y se dijo inocente, pues insistió que él sólo estaba recargado en el carro cuando de pronto fue golpeado por tres sujetos. Negó haber robado el automóvil, aunque en sus ropas la Policía le encontró una llave de Nissan, la cual presuntamente utilizó para hurtar el carro del funcionario del Congreso local.

La juez señaló que había elementos que escapaban de la lógica, como el hecho de que el robo del automóvil haya sido reportado a la Policía media hora después y no en el momento en que el propietario se dio cuenta.

“Le comunicó que usted está libre, pero no porque haya sido probada su inocencia, sino porque hay un solo elemento en su contra y los estándares exigen que esa prueba se complemente con otras, pero si el ministerio público encuentra elementos por la naturaleza del delito, usted puede ir a prisión”, sentenció la juez.

Por último, el imputado manifestó su voluntad de proceder contra las personas que lo detuvieron y también contra los policías, pues sostiene que éstos últimos también lo golpearon.