Un grave accidente ocurrido la noche del sábado en el barrio La Sierra, al sur de Bogotá, dejó once personas atropelladas por un taxista que conducía en estado de ebriedad, informaron las autoridades. Entre las víctimas hay cuatro menores de edad, uno de ellos diagnosticado con muerte cerebral.
De acuerdo con el teniente coronel Jhon Silva, de la Policía de Tránsito de Bogotá, el conductor fue capturado en flagrancia y puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación. Las primeras investigaciones confirmaron que el hombre manejaba bajo los efectos del alcohol al momento del siniestro.
La general Susana Blanco, directora de la Policía de Tránsito de Colombia, indicó que el taxista acumulaba más de diez multas por infracciones viales cometidas en los últimos años.
Por este hecho, podría enfrentar sanciones que incluyen la suspensión de su licencia de conducción por cinco años y una multa que superaría los 15 millones de pesos colombianos (aproximadamente 73 mil pesos mexicanos).
Según la Secretaría de Salud de Bogotá, de los cuatro menores heridos, dos sufrieron traumas craneoencefálicos severos y uno fue diagnosticado con muerte cerebral.
Otro niño, de siete años, permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos bajo protocolos de neuroprotección cerebral, mientras que una niña de 12 años continúa en observación pediátrica con evolución favorable. Un bebé de cuatro meses resultó con múltiples politraumatismos.
Un familiar de los niños más afectados informó que la familia espera señales de actividad neurológica en las próximas 72 horas, tiempo clave para evaluar su pronóstico.
Las otras siete víctimas, adultos entre 22 y 40 años, sufrieron fracturas y lesiones en distintas partes del cuerpo, como la cabeza, el rostro y la cadera. Todos fueron trasladados a las clínicas Santa Juliana y La Victoria, donde reciben atención médica.
El caso ha generado gran conmoción en la capital colombiana y reavivó el debate sobre la responsabilidad vial y el control del consumo de alcohol entre conductores profesionales.
