Honduras enfrenta una grave emergencia tras las lluvias que afectan al país desde finales de septiembre, causando al menos 15 muertos y cerca de 29 mil personas damnificadas.
Ante esta situación, la presidenta Xiomara Castro convocó este viernes al Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) para coordinar acciones de emergencia, salvamento y protección de la población y sus bienes. La reunión se realizó a las 10:00 a. m., hora local, en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Las lluvias torrenciales han provocado inundaciones, derrumbes y deslizamientos en Tegucigalpa y otros municipios. La mandataria lamentó la muerte de una joven de 23 años en un barrio de la capital.
El último informe de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias indica que, de las 15 víctimas, 13 murieron por sumersión, una por el colapso de su vivienda y otra por la caída de un árbol.
Además, 2 mil 33 viviendas resultaron dañadas, de las cuales 76 quedaron totalmente destruidas, y 91 comunidades permanecen incomunicadas.
El Cuerpo de Bomberos de Honduras informó sobre el rescate de 30 personas y la atención de al menos nueve inundaciones y cuatro derrumbes en Tegucigalpa.
Las autoridades de socorro se encuentran desplegadas en las zonas afectadas, trasladando familias y habilitando albergues temporales.
La alerta roja se mantiene por 24 horas en cuatro municipios de Francisco Morazán, Valle y Choluteca. Otros nueve departamentos están en alerta amarilla por evacuación preventiva y tres más en alerta verde.
Francisco Argeñal, director del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), advirtió que las lluvias continuarán y que una onda tropical ingresará al país el lunes.