El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) condenó este miércoles la interceptación por parte del Ejército de Israel de la Global Sumud Flotilla, que se dirigía a la Franja de Gaza para entregar ayuda humanitaria, calificándola como un acto de “piratería”.
En un comunicado recogido por el diario Filastín, Hamás señaló que la detención de activistas y periodistas en aguas internacionales constituye un “ataque traicionero” y un “delito de piratería y terrorismo marítimo contra civiles”. Además, recordó que estas acciones se suman al “negro historial de crímenes de la ocupación”.
El grupo destacó que los activistas se encontraban en una misión humanitaria “urgente” para entregar ayuda al pueblo palestino “asediado” en Gaza, que según Hamás ha sufrido “genocidio y hambruna sistemática durante dos años”.
Por ello, hizo un llamado a la comunidad internacional y a la ONU para que asuman sus responsabilidades y pidió a la población de otros países que organicen protestas y huelgas para condenar el ataque.
El Ejército israelí ha detenido a las 44 embarcaciones que formaban parte de la Flotilla Global Sumud, según informó el ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar.
Ningún barco logró llegar a la Franja de Gaza y todos los integrantes de la expedición, incluidos la activista sueca Greta Thunberg, el brasileño Thiago de Avila y la exalcaldesa de Barcelona Ada Colau, ya se encuentran detenidos en el puerto de Asdod, donde también se han depositado las embarcaciones.
La iniciativa humanitaria también denunció el uso de cañones de agua contra algunas embarcaciones y la interrupción de sus comunicaciones y transmisiones en directo, mientras se encontraban a unas 70 millas de Gaza.