El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ordenó el domingo el despliegue de 200 soldados de la Guardia Nacional de Oregón bajo autoridad federal, después de que el presidente Donald Trump anunciara el sábado su plan de enviar fuerzas militares a Portland.
La medida busca proteger instalaciones federales de migración y, según Trump, se permitiría el uso de “toda la fuerza, de ser necesario”.
El estado de Oregón presentó una demanda en un tribunal federal de Portland contra Trump, Hegseth y la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem.
La acción legal, encabezada por el fiscal general demócrata Dan Rayfield, acusa al presidente de exceder sus facultades y vulnerar la soberanía del estado.
Según la demanda, las protestas contra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) han sido pequeñas y contenidas desde junio.
El despliegue federal, similar al realizado en otras ciudades gobernadas por demócratas como Los Ángeles y Washington D.C., sorprendió a varios funcionarios del Pentágono.
Hegseth formalizó la orden mediante un memorando que se adjuntó a la demanda de Oregón. Rayfield señaló que enviar 200 efectivos para proteger un solo edificio “no es normal”.
Datos preliminares muestran que los delitos violentos en Portland han disminuido en el primer semestre de 2025, con una caída del 51 % en homicidios respecto al año anterior. A pesar de esto, Trump ha hecho de la delincuencia un tema central de su administración.
El alcalde de Portland, Keith Wilson, y otros funcionarios estatales se enteraron de la orden presidencial a través de redes sociales.
La medida ha generado preocupación sobre el uso de la fuerza por parte de las tropas federales y ha incrementado la tensión en ciudades estadounidenses tras recientes incidentes relacionados con el ICE.