El Año Nuevo llega acompañado de expectativas, emociones y costumbres que invitan a cerrar etapas y dar paso a un nuevo comienzo lleno de ilusiones y propósitos.

Como cada diciembre, el ánimo de los últimos días suele oscilar entre la nostalgia por lo vivido y el asombro ante lo rápido que transcurre el tiempo. Sin embargo, en la antesala del cambio de calendario predomina la ilusión por la vuelta al Sol que inicia y las oportunidades que puede traer consigo.

En la cultura mexicana, a lo largo de los años se han popularizado distintos rituales que, según la creencia, ayudan a atraer metas, deseos y buenos augurios para el ciclo que comienza.

Algunos se realizan justo a la medianoche, mientras que otros pueden llevarse a cabo durante las primeras horas del 1 de enero o incluso a lo largo de todo el día.

Ya sea por fe, tradición o simple curiosidad, estas prácticas siguen vigentes. A continuación, te compartimos algunos de los rituales más conocidos para recibir el Año Nuevo 2026 y el significado que se les atribuye.

Uno de los más tradicionales es comer 12 uvas al ritmo de las campanadas. Cada una representa un mes del año y un deseo para el periodo que inicia.

Las lentejas, por su forma y simbolismo, se asocian con la abundancia económica. Por ello, muchas familias las incluyen en la cena de fin de año o realizan un ritual que consiste en lanzarlas sobre la cabeza a las 12 en punto, como si se tratara de un baño de prosperidad.

Después, se recogen algunas del suelo y se guardan en una pequeña bolsa o costal rojo, que se lleva en la cartera o el bolso durante todo el año.

Otra creencia popular señala que las personas solteras deben colocarse debajo de la mesa al llegar la medianoche del 1 de enero para atraer el amor en los próximos meses.

El color de la ropa interior también juega un papel importante. El rojo se asocia con el amor; el amarillo, con el dinero y la prosperidad; el verde, con la buena fortuna; el azul, con la salud y la armonía; y el blanco, con la paz y la felicidad.

Para quienes desean viajar, existe el ritual de salir corriendo con una maleta y recorrer la calle o la manzana. Se dice que empacar el equipaje como si se tratara de un viaje real refuerza la intención.

La limpieza del hogar es otro clásico. Barrer de adentro hacia afuera simboliza dejar atrás las malas energías y comenzar el año con un ambiente renovado.

Estrenar ropa el 31 de diciembre también es una práctica común, no solo por lucir bien en la cena, sino como símbolo de atraer cosas nuevas y comenzar el ciclo con energía fresca.

Finalmente, los borreguitos colocados en puertas o entradas representan abundancia y estabilidad económica. Estas figuras suelen permanecer visibles durante todo el año como símbolo de prosperidad para el hogar.