Cuando llega el calor, también aparecen las ganas de disfrutar platillos frescos, rápidos y llenos de sabor. Por eso, los pescaditos capeados se convierten en una opción ideal para el fin de semana: crujientes, suaves y muy fáciles de preparar en casa.
Esta receta clásica de la cocina mexicana destaca por su versatilidad, ya que no requiere muchos ingredientes ni técnicas complicadas. De hecho, es posible que ya tengas en tu alacena todo lo necesario: harina, sal, polvo para hornear, aceite y una bebida con gas para lograr una textura esponjosa y ligera.
La clave del éxito está en la masa que recubre al pescado. En esta versión, se utiliza cerveza para obtener un capeado crujiente con un sabor muy especial. Si prefieres evitar el alcohol, puedes usar agua mineral, que cumple con la misma función: darle aire y ligereza a la mezcla.
Ingredientes:
- 6 filetes de pescado blanco
- 1 taza de harina de trigo
- 1 cucharada de polvo para hornear
- 1/2 taza de cerveza (o agua mineral)
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- Aceite para freír
- 1 pizca de sal
Preparación paso a paso:
1._ En un recipiente, mezcla la harina con el polvo para hornear, el ajo en polvo y la sal.
2._ Añade poco a poco la cerveza o agua mineral hasta formar una masa espesa.
3._ Corta los filetes al tamaño deseado.
4._ Calienta el aceite en un sartén a fuego medio-alto.
5._ Sumerge los filetes en la mezcla hasta cubrirlos por completo.
6._ Fríe en el aceite caliente hasta que estén dorados por ambos lados.
7._ Retira y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Consejos para servirlos
Para lograr un acabado crujiente, asegúrate de que el aceite esté bien caliente antes de freír. Puedes utilizar cualquier pescado blanco como tilapia, merluza o róbalo. Al servir, acompáñalos con una ensalada fresca o tu salsa favorita si quieres un toque más intenso.
Esta receta es perfecta para quienes buscan una opción rica y práctica para disfrutar del verano sin pasar demasiado tiempo en la cocina.