Una nueva imagen captada por el telescopio espacial Hubble muestra los restos de una antigua explosión estelar en la Gran Nube de Magallanes, una galaxia vecina situada a unos 160,000 años luz de la Tierra. Los filamentos brillantes que aparecen en la fotografía son los vestigios de una supernova, resultado del colapso de una estrella masiva que agotó su combustible.
Este fenómeno, aunque ocurrió hace miles de años, sigue siendo visible gracias a la tecnología moderna, recordándonos que el universo está en constante cambio.
La Gran Nube de Magallanes es un punto clave para la observación astronómica. Allí, los científicos estudian cómo nacen y mueren las estrellas. Cuando una supernova ocurre, libera enormes cantidades de energía y dispersa materiales como oxígeno, carbono y hierro al espacio. Estos elementos, con el tiempo, dan origen a nuevas estrellas, planetas y, potencialmente, vida.
La imagen no solo es un espectáculo visual, sino también una evidencia del ciclo continuo del cosmos: una explosión violenta que marca el final de una estrella, pero también el comienzo de nuevas formaciones estelares.