Visto a toro pasado, en efecto cometieron algunos errores, no escucharon –y por lo que se nos platica, con mucha anticipación- una estrategia que uno de sus aliados históricos, actualmente legislador local, les presentó por allá cuando apenas empezaba la lucha interna por las candidaturas.

Desestimaron los consejos de alguien que si de algo tiene experiencia, es haber vivido desde muy dentro el trabajo estratégico del tricolor hace ya algunas décadas, no obstante, como dice esa sabia frase, el hubiera no existe y ahora, de lo perdido, lo que caiga. Sin embargo, están obligados a abrirse más, a valorar algunos cuadros interesantes que conservan y a intentar la recuperación con miras hacia la elección del 2015.

Por lo pronto, ¿hacia dónde se orienta la recuperación de la estructura partidista? Ya el propio dirigente estatal Manuel Martínez Garrigós dijo que se va y deja el cargo, además irá al Congreso como legislador por la vía plurinominal, así que deberán haber empezado a operar los cambios.

Tampoco están en el desamparo como hace seis o 12 años, hoy tienen ni más ni menos la Presidencia de la República y si una vez que tome cargo Enrique Peña Nieto los quiere ayudar, lo hará con las manos en la cintura, a través de las delegaciones que son muchas y no pocas, con influencia y bastante peso.

Pero insistimos, tienen la obligación de ir por una recluta de cuadros y en muchos lados tienen, aún en municipios alejados del centro, hay por ejemplo alcaldes que sin mucho ruido ni protagonismo cumplieron con su pueblo, no obstante eso la ola amarilla se los llevó, sin que ello signifique que no son piezas políticas interesantes y de valor.

Uno de esos personajes, por ejemplo, parece ser el edil de Tlaltizapán, Ennio Pérez Amador, él pudo ser el candidato a diputado local por ese distrito, porque se la ofrecieron, pero declinó bajo la excusa de que en campaña se comprometió a concluir cabalmente los tres años.

Más aún, es actualmente presidente de la Junta de Gobierno del Instituto de Desarrollo y Fomento Municipal (Idefom), pero hay muchos otros que sin estar constantemente en los reflectores, podrían ayudar a sentar las bases de la recuperación, algunos piensan en la todavía diputada federal y en breve legisladora local Rosalina Mazari Espín como un buen elemento para algunas necesidades de partido.

El movimiento de izquierda, conformado por el PRD, PT y Movimiento Ciudadano, buscará con toda lógica, perpetuarse no sólo un trienio o sexenio, sino los que sean posibles, en el Distrito Federal se afianzaron duramente y mire que en esta justa le dieron una verdadera paliza a los adversarios.

Habrá que ver cómo llega el gobernador electo Graco Ramírez, está dando señales de habilidad, aquella reunión con el próximo jefe de Gobierno de la capital del país Miguel Ángel Mancera, sin duda le generó impacto positivo electoral y el reciente encuentro con el gobernador de Guerrero Ángel Aguirre Rivero indica que en verdad va en serio por dar buenos dividendos en cuestiones de seguridad y mire que es el reclamo más sentido de la sociedad.

O sea, cada partido político, sus actores y el Gobierno en turno harán lo humanamente posible por mantener el poder unos, reconquistarlo los otros y en ello se vale de todo, de la inteligencia y capacidad, de los resultados tangibles de cada parte depende el futuro de ellos.

El panismo pareciera dispuesto a seguir tocando fondo, se acuerdan de nosotros, van a buscar al precio que sea instalar en la presidencia del CDE al candidato perdedor Adrián Rivera Pérez, aún sabiendo que no es el liderazgo que necesitan (recuérdese que fue el delegado de ese partido en Guerrero para la elección de gobernador y perdieron el registro), sin embargo, con el control de consejeros y delegados solitos se harán el harakiri.

Hay que irle dando seguimiento al PRI, donde reiteramos, hay gente pensante, aunque tampoco se puede negar, también viejas figuras que siguieron haciéndole mucho daño a la institución, al considerar que podían regresar por lo que no se habían llevado cuando tuvieron alguna responsabilidad pública.

Para quienes nos dedicamos a la tarea de informar y además de hacer algunos análisis, lo que pasó el primero de julio y lo que viene será muy interesante, hay que ver cómo se maneja la correlación de fuerzas, de qué manera la nueva administración da solución a problemas que quienes se van no lograron desvanecer, como el relacionado a la seguridad.

Será la primera vez que Morelos sea gobernado por la izquierda, eso es histórico, obligadamente deberán desarrollar prácticas distintas y sobre todo ser una autoridad de mucho contacto con el gobernado, pero el de abajo, porque es el clientelismo del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, ¿o no?

Graco Ramírez deberá buscar de inmediato ganarse la voluntad presidencial para aspirar a apoyos adicionales desde las dependencias federales y sus respectivas delegaciones, éste ha sido un elemento que posibilita la ejecución de acciones más allá de las programadas con base en nuestro raquítico presupuesto anual, porque es en la práctica, una auténtica miseria, de ahí que insistamos en aspectos novedosos al corto y mediano plazo y de los cuales dependerá mucho el rumbo que tome nuestra entidad en los años siguientes.