Lo anterior ha puesto en alerta al titular de esa dependencia, Víctor Manuel Caballero Solano, porque siendo una figura candidateable, ya sea hacia la gubernatura estatal como se ha considerado o a la presidencia municipal de Cuernavaca, estas fallas le pueden costar mucho.
La información indica que hay cuatro o cinco colaboradores de media estatura que no vienen haciendo bien las cosas en sus respectivas responsabilidades y se habla de un sacudimiento en los próximos días.
Si son algunos los involucrados, aparecen conforme a esos expedientes nombres de servidores públicos de medio pelo como Mario Oliva, que viene del sector educativo, Alfonso Magos, César Odín, Beatriz Díaz o Fermín Tovar; este último estaba en la Secretaría de Finanzas y ahí habría dejado serias irregularidades.
El caso es que Caballero Solano va por una buena reestructuración interna de la Secretaría si quiere mantener la buena imagen que está siendo amenazada por incompetencia de algunas estructuras.
Existen asuntos que se le vienen saliendo de control, por lo menos en lo relacionado a la falta de funcionalidad de clínicas y hospitales donde ya el gobernador Marco Adame cortó el listón. El enojo colectivo es visible y puede crecer si no hay una corrección de las deficiencias.
Los enemigos políticos y la oposición puede aprovechar tales errores como banderas políticas para pegarle al funcionario y de paso al propio jefe del Poder Ejecutivo, porque lo están comprometiendo en inversiones no concluidas.
Caballero Solano ha sido uno de los pocos integrantes del gabinete que ha manejado las cosas con mucho cuidado. Es un personaje fino y educado. Por eso se le menciona como posible aspirante a algún cargo de elección popular. Pero para ello lo menos que se debe hacer es jugar con los sentimientos de la gente y eso de ir a inaugurar obras que no están listas para ser utilizadas es muy riesgoso. Así que cerca de una media docena de sus más cercanos podrían ser dados de baja en cosa de días.
MAESTROS JUBILADOS, OPERA SNTE
Y en otro tema, ayer, el movimiento de maestros jubilados y pensionados signaron un acuerdo a su favor por 76 millones de pesos con lo que concluyen sus protestas y manifestaciones en exigencia de pago de prestaciones.
Otra vez fue el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), tanto delegación local como la representación nacional, que en una larga negociación del fin de semana logró que el gobierno estatal cediera un poco o un mucho, porque de 20 millones que estaban ofertando, llegaron hasta los 76 para más de ocho mil profesores.
Pero todo esto tiene además otras connotaciones. Este arreglo les quitó una importante bandera política a algunos legisladores locales como Lilia Ibarra, Jorge Arizmendi y otros que estaban "apadrinando" a los jubilados y pensionados con una demanda de 200 millones de pesos.
Lo que nos decía uno de los líderes es que en realidad sólo cerca del 50 por ciento de esos ocho mil jubilados tiene derecho a los pagos que demandan; los demás estaban siendo utilizados por los diputados para elevar los montos de la exigencia, sabrá Dios con qué intenciones.
Como en muchos otros arreglos del sector magisterial, aparecieron en escena representantes del CEN del SNTE como Moisés Armenta, uno de los operadores de la maestra Elba Esther Gordillo Morales, que aún sigue en el estado desde el conflicto magisterial de grandes dimensiones del 2008.
Bueno, también algunos representantes populares del PRD andaban muy metidos encabezando a los enojados maestros que con todo derecho pedían ser atendidos, y es que hablar de más de seis o siete mil almas ya suena interesante cuando se ven las cosas desde el punto de vista político-electoral y como viene una contienda de esta naturaleza pudieran ser una buena carnada para utilizarse con pretensiones futuristas.
Claro que tampoco se trata de un conflicto de ayer, era algo con meses de jaloneos que esperaba una respuesta de gobierno y especialmente del IEBEM que se declaraba sin fondos suficientes para resolver.