Finalmente, ayer se puso en marcha otra estrategia para tratar de resolver el problema de desabasto de medicamentos que prevalece en gran parte del país. En esta ocasión incluyeron a los gobiernos de las entidades para tratar de contrarrestar lo que ha sido uno de los problemas que más ha golpeado a la llamada Cuarta Transformación.
Aunque se trata de una medida implementada por el gobierno federal, la participación de los gobiernos locales y sus áreas de salud tendrá un papel protagónico, según lo que refirió en julio la presidenta de México, cuando adelantó que lanzaría el programa de las Rutas de la Salud.
Aunque este proyecto busca abastecer al primer nivel de atención —es decir, a los centros de salud—, de manera apremiante se debe incluir a los siguientes niveles, pues en ellos también se ha evidenciado el problema, según lo han manifestado los propios usuarios.
Aunque el gobierno presentará sus propias estadísticas de la estrategia, serán los pacientes quienes confirmen si está dando resultados o si se trata de otra mala decisión, como lo fue en su momento la famosa megafarmacia.