POLÍTICAS EDUCATIVAS

El magisterio siempre ha sido un aliado. Tiene décadas participando en la definición sobre una política educativa de avanzada. Ha sido, desde la década de los noventas, un factor de cambio no sólo por su fuerza social y política sino por contar con una visión intelectual, educativa y técnica, y ha colaborado con los distintos gobiernos –federal y estatales- para llevar a cabo las modificaciones que se necesitan. El proceso educativo se lleva a cabo por el trabajo fundamental de los maestros. En otros procesos productivos se puede recurrir a instrumentos o herramientas, pero en el educativo, la tarea dominante es del magisterio, aunque se auxilie con útiles escolares, material didáctico, así como la incorporación de la televisión, de las computadoras y el internet. El trabajo docente, entonces, es central.

Por lo tanto, de cierta manera, resulta natural que cualquier juicio que podamos hacer, a favor o en contra, del proceso educativo, se centre en quien es el principal componente: las maestras y los maestros. Y sin embargo los maestros no son los responsables de la situación actual de la educación. Es, en todo caso, la suma de las condiciones estructurales que el país vive desde de la década de los ochentas, cuando inició la transformación mundial de las economías y la revolución tecnológica. Si se quiere hacer una evaluación objetiva de qué define hoy la calidad educativa mexicana, se tiene que hacer a través de una óptica integral e histórica. Nadie previó la rapidez conque se darían los cambios tecnológicos.

UN NUEVO PARADIGMA

Si hoy queremos enfrentar con objetividad, con capacidad técnica las nuevas condiciones de la educación, se tiene que invertir en la formación y actualización de los maestros para los nuevos retos, empezando con quienes ingresan a la Escuela Normal y a las licenciaturas en las instituciones de educación superior y que hoy en día se forman para ser los maestros del futuro. Los profesores en funciones requieren de un segundo idioma y del uso de las tecnologías en materias básicas. Se necesita, en una palabra, invertir más en los maestros.

A nivel global persiste una óptica y una oleada a favor de la instrumentación de reformas educativas en la búsqueda de la calidad educativa. Son esfuerzos mundiales. A nivel local la responsabilidad recae en las autoridades federales y locales, pero también en la sociedad en general para que contemos con políticas públicas educativas de largo plazo.

ALREDEDOR DEL PAIS

DERECHO ELECTORAL.- La semana pasada señalábamos que la materia electoral en el país, ha tomado un inusual grado de minuciosidad y de tecnicismos que rebasa cualquier lógica democrática que le dio lugar. Tiene razón el presidente del Instituto Federal Electoral (IFE) en el llamado al Congreso de la Unión para que apruebe una reforma electoral mínima que, por lo menos, dote al máximo órgano electoral de los elementos que le permitan mejorar las condiciones de escrutinio y cómputo para el 2012, si es que se quieren reducir los márgenes de errores aritméticos que tienen las actas de escrutinio. En 2006 fue de 53.3%, mientras que en el 2009, registró un 30.6. En efecto, se ha reducido pero requiere atención específica del legislativo.

PLAZA CARSO-MUSEO SOMUAYA. Desde que el Museo Soumaya, al norte de la ciudad, abrió sus puertas el pasado 29 de marzo con entrada gratuita a todo el público, más de 70 mil personas lo han visitado; es decir un promedio al día de 3 mil asistentes entre semana y 6 mil visitantes los fines de semana, que van desde turistas nacionales y extranjeros, personas con capacidades diferentes, vecinos, adultos mayores, amas de casa, empleados de oficinas, jóvenes, escolares, universitarios y niños, quienes han recorrido el espacio y las seis salas temáticas que conforman el museo.

PROGRAMA DE ALFABETIZACIÓN EN PUEBLA.- La UNAM, la BUAP y el gobierno de Puebla pusieron en marcha un programa para abatir el analfabetismo, que en la entidad rebasa la cifra de 480 mil personas. En una primera etapa, la “cruzada por la alfabetización” atenderá a 32 mil personas de 13 municipios. No es una tarea fácil, pero se cuenta con un programa articulado con dos de las instituciones de educación superior más prestigiadas del país.