Semanas atrás, los ejidatarios, que son propietarios del predio donde se deposita actualmente a basura, habían advertido que el municipio tenía la obligación de remediar el basurero tres meses antes de concluir su periodo, así como de realizar otras estructuras más.

Ayer por la mañana, una treintena de ejidatarios se trasladó hasta la entrada del basurero para abrir una zanja que impidiera el acceso de los camiones; esperaban que se presentara la autoridad municipal para dialogar.

Ubaldo Batalla de Jesús, presidente del Comisariado Ejidal de Jojutla, explicó que hasta ahora el municipio no ha cumplido con el saneamiento como se acordó “y no vemos que meta las tuberías para lo de los gases y ése es el motivo porque el que se va a cerrar”.

Señaló que aunque que el Ayuntamiento está colocando tierra sobre la basura, en buena parte es tepetate y una capa mínima de ese material, por lo que requieren que los especialistas revisen y den un dictamen acerca de si está bien hecho. “Hasta ahorita desconocemos, ni ellos ni nosotros sabemos (si se está haciendo bien). Se mandó un oficio a CEAMA (sic) para que intervenga y venga a dar una checada aquí, para que todo salga bien. CEAMA es la que se encarga del chequeo de los basureros y cuando diga que todo está bien, ya se vuelve a abrir el basurero; mientras, se va a cerrar.”

Batalla de Jesús refirió que una comisión de ejidatarios acudió ayer a lo que todavía llaman “CEAMA” (hoy Secretaría de Desarrollo Sustentable) para solicitar su intervención.

Apuntó que por su parte, el Ayuntamiento asegura que los trabajos que realiza son los correctos, para ellos está bien hecho, pero “nosotros estamos todavía con la duda de que no ha quedado bien. Ellos hacen un trabajo que ni ellos conocen cómo debe de ir lo de la saneada, mucho menos nosotros”.

Otro ejidatario apuntó que el convenio con el actual gobierno incluye puntos que no se han cumplido.

“Una de las cláusulas incluía la construcción de cercas del basurero; otra, que el municipio se compromete a construir cunetas laterales al camino que lleva al basurero; construir una caseta de vigilancia, que no se ha colocado; la cláusula novena dice que el Ayuntamiento se compromete a realizar por su cuenta todos los trabajos que sean necesarios al interior del centro de acopio, con la finalidad de procurar un buen funcionamiento del mismo; la décima dice que el Ayuntamiento se compromete a instalar una caseta de vigilancia que permita un buen control de acceso de los vehículos particulares oficiales al centro de acopio, pero no hay caseta, todo está destruido; la décima primera, el Ayuntamiento se compromete a que tres meses antes del término de su gestión, dejar saneado completamente el área de depósito de la basura, cuando ya sólo faltan dos meses; la décima segunda dice que el Ayuntamiento se compromete a realizar las acciones necesarias para seleccionar los residuos sólidos recolectados por el servicio de limpia para que éstos lleguen directos a su centro de acopio; la décima tercera, el Ayuntamiento se compromete a entregar y establecer las cuotas que se cobrarán a los vehículos oficiales y particulares y por concepto de ingreso para el depósito de basura en el área, de acuerdo a la Ley de Ingresos. Dichos ingresos serán beneficio del ejido para mejoraras del centro de acopio.”

Alrededor de la una de la tarde, con maquinaria, se comenzó a abrir una zanja para impedir el paso de vehículos al tiradero. Ya los ejidatarios habían retirado a dos, lo que presume que generará un problema con la recolección de desechos en el municipio.

Finalmente, los ejidatarios informaron que al lugar llegó el regidor Antonio Guerrero, quien dialogó con ellos y les pidió que no cerraran, pues ya había acudido a la “CEAMA” y pronto –aunque no dio fecha– llegarían las autoridades para hablar de los detalles. Los ejidatarios no cedieron y aseguraron que se quedará cerrado hasta que vengan las autoridades estatales.