Desde luego que es difícil saber con precisión cuáles fueron los temas abordados, pero ateniéndonos a declaraciones del secretario al final de la reunión, parece que se le da seguimiento a todo lo que tiene que ver con la seguridad pública, porque el funcionario mencionó que “debido a muestras claras de que los municipios no están logrando resultados ante la delincuencia, será el Mando Único el que se tenga que hacer cargo de dicha tarea en todo el territorio.
Si usted recuerda, la propuesta original de esta modalidad policíaca era esa, que los ayuntamientos dejaran en manos de las corporaciones estatales, con la asignación a ésta de algunos elementos municipales, las tareas de prevención y persecución, cosa que provocó un intenso jaloneo hasta que se optó por ceder un poco, pero hoy parece que están buscando el consentimiento de cada uno de los ediles para que se haga lo mismo que en Amacuzac, Yautepec y Tlaquiltenango; es decir, el control lo tendrán esas fuerzas estatales del orden.
Debió ser pues ese el asunto que vinieron a tratar los alcaldes, de entrada, la de Jojutla, Hortencia Figueroa Peralta y el de Zacatepec, la propuesta-compromiso del Gobierno, a través de Messeguer debe ser que como a nivel municipal, no han podido disminuir la incidencia delictiva; ellos lo harán, no les vemos otra salida, acabarán aceptando.
Por otro lado, también y como ya es una rutina, un contingente del movimiento Antorcha Campesina se presentó para insistir en que les dé terrenos, recursos financieros para construir viviendas; luego el alumbrado, agua, pavimentación, escuela, becas para sus hijos, es decir, que los mantengan, porque “son gente pobre que no tiene dónde vivir”.
Ya tienen espacios en el municipio de Emiliano Zapata, en Alpuyeca, a donde además se están llevando algunos desplazados del Texcal, pero siguen pidiendo más y Palacio de Gobierno es el lugar apropiado para lanzar consignas contra las autoridades a fin de presionar para seguir medrando a costa de nuestros impuestos. Fuera de eso, representantes del Sindicato Mexicano de Electricistas que estuvieran en Plaza de Armas, para continuar insistiendo en que se reinstale a los despedidos por la desaparición de la Comisión de Luz y Fuerza del Centro, en el sexenio anterior.