El presidente de la agrupación, que aglutina a todos los colegios y asociaciones de galenos de la entidad, Miguel Cervantes Contreras, expuso que no se han unificado criterios sobre los elementos que contienen las recetas y con ello se argumenta en farmacias que se llevan a cabo cambios no prescritos por el médico.

Afirmó que existen estudios en el sentido que de 8 de cada 10 recetas no son surtidas tal cual fueron indicadas por los doctores, pues los expendedores venden al paciente otros productos, como medicamentos de patente o por el contrario por sustancia activa, que tienen presentaciones distintas, y con gramajes diferentes a los que se han recetado.

El problema advirtió es que “por ejemplo yo receto determinada medicina, sobre todo en casos de urgencia a un paciente con una infección urinaria y va a la farmacia, sigue el tratamiento y a los cinco días regresa a reclamar a su médico y a pedirle otra receta, pues se da cuenta de que no usó lo que se le prescribió al pie de la letra”.

El presidente del Colegio dijo que hasta ahora no se han registrado casos graves de consecuencias en pacientes, pero a mediano plazo esto podría ocurrir, sino se unifican criterios.

Manifestó que la postura del Colegio es a favor de que se evite la automedicación y de que no se vendan antibióticos sin receta, incluso expresó que lo galenos han aceptado dar copia de su receta a los pacientes o indicaciones por separado para cumplir con los nuevos lineamientos federales, pero alertó que la sustitución de medicinas por parte de los vendedores en las farmacias no se ha solucionado.