Cuernavaca, Morelos.- Sin contratiempos y por mayoría de votos, la magistrada María del Carmen Verónica Cuevas López resultó electa como nueva presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), y entrará en funciones a partir de mañana.

Después de varios días de tensión, el grupo de los magistrados disidentes no sólo logró mantener la cohesión entre sus nueve integrantes, sino sumó dos votos adicionales y fraccionó al grupo institucional de magistrados, liderados por Nadia Luz Lara Chávez, quien apoyaba a su homólogo Jorge Gamboa Olea.

Sin imprevistos y en completa civilidad, la tarde de ayer se llevó a cabo la sesión de Pleno solemne, convocada ex profeso para la designación del nuevo titular del TSJ. Para evitar suspicacias, el magistrado Norberto Calderón Ocampo, quien fue habilitado como magistrado numerario para participar en el proceso electivo, pidió que el voto de cada magistrado fuera depositado no en la acostumbrada urna de madera, sino en una urna transparente, que él mismo llevó al recinto judicial.

Una vez emitida la votación mediante cédula, el secretario general de acuerdos contabilizó cada voto en voz alta con un resultado final de 11 votos a favor de Cuevas López, cuatro a favor de Jorge Gamboa Olea y uno para Rocío Bahena.

De inmediato, el Pleno tomó protesta a Cuevas López como magistrada presidenta electa del TSJ, por el periodo que comprende del 18 de mayo de 2016 al 17 de mayo de 2018.

En entrevista, Cuevas López cambió su postura beligerante por un discurso ambiguo y ligero respecto a las sospechas de corrupción dentro del tribunal, que salieron a la luz semanas previas al relevo y como parte de la confrontación entre los dos grupo de magistrados.

“Si me lo permiten, yo lo que busco es la unidad y ver qué es lo que hay, como bien saben, apenas estoy tomando el cargo. En su oportunidad yo me pronunciaré al respecto”, dijo, y señaló que con los otros dos Poderes, Ejecutivo y Legislativo, mantendrá una relación de respeto y comunicación.

Pese a la insistencia de los medios de comunicación sobre qué sucederá ante las sospechas de corrupción e irregularidades en la institución, la presidenta electa pidió tiempo para evaluar el estado en que recibirá el TSJ.

“Quiero que me comprendan en este momento, todas esas son especulaciones y necesito yo llegar a ver cómo es que las cosas están. No puedo hacer juicios a priori porque no es correcto, entonces si me lo permiten y me dan la oportunidad, en su momento yo estaré pronunciándome al respecto”, afirmó.

Hoy, en su último día como magistrada presidenta del TSJ, Nadia Luz Lara Chávez presentará su informe de actividades en el Salón de Plenos.