José Martínez Cruz, integrante de la Comisión Independiente de Derechos Humanos (CIDH), señaló que no puede haber paz frente a niveles de violencia tan graves como los que existen en Morelos; lo anterior, en referencia al estudio publicado por el Instituto para la Economía y la Paz, que sitúa al estado entre los menos pacíficos de México, ya que se ubica en el lugar 30 de las 32 entidades. Por otro lado, indicó que era de esperarse el manejo político que se dio en la decisión de desechar el juicio al gobernador Graco Ramírez Garrido Abreu en el Congreso local.

El vocero de dicha organización apuntó que el estudio ya referido, en el que se observa Morelos como el tercero menos pacífico de todo el país, es un indicador que se suma a lo que organizaciones sociales y varios sectores locales han señalado y que contrasta con el discurso oficial.

“Uno observa la realidad, vive aquí cotidianamente, los índices de violencia son tan altos y además la saña con la que están ocurriendo, por ejemplo, insistimos, los feminicidios, es verdaderamente dolorosa. No puede haber paz frente a niveles de violencia tan graves y sobre todo cuando no hay justicia, ni medidas de fondo para resolver las causas de fondo, como la pobreza y la desigualdad, pues evidentemente no se puede considerar que hay paz social”, explicó.

Comentó que no sólo son las organizaciones críticas al gobierno, sino que hay otros indicadores como el que ya se refiere, por parte de organismos internacionales que muestran indicadores sobre la paz.

En cuanto a la resolución del Congreso local que desechó el iniciar el juicio político al gobernador Graco Ramírez, Martínez Cruz destacó que la CIDH no participó en ese proceso concretamente, “no descalificamos, pero nosotros no participamos en esa solicitud, porque no creímos que su destino final fuera realmente el cambio”.

Manifestó que desde el punto de vista de la organización, lo importante es que se avance en combatir la corrupción, la impunidad, el autoritarismo, todos esos aspectos violatorios de derechos humanos que es lo que atañe a esa asociación civil.

Desde su punto de vista, era de esperarse un resultado de esta naturaleza, “porque prácticamente todas las fuerzas políticas desecharon ese juicio, con excepción de una, pero no quiere decir que esa una esté exenta de lo que critica”.

Hizo notar que en todo el país hay más de 900 demandas de juicios políticos que no se aprueban, “porque hay conveniencia, complicidad, entre los diferentes partidos, cuando unos están gobernando se defienden. En el caso del PAN ahora critican lo que hicieron cuando estuvieron gobernando, pero nosotros reclamamos a cualquier partido político que incurra en violaciones de derechos humanos”.