Este jueves 8 de octubre, en la Sala Dos se llevó a cabo la audiencia de debate y de lectura de la sentencia en la que el tribunal, integrado por los jueces Leticia Damián Avilés, Arturo Ampudia Amaro y Patricia Soledad Aguirre Galván, determinó que las pruebas desahogadas fueron suficientes para presumir la responsabilidad de Rodrigo “N”, pastor de la iglesia de nombre “Ministerio de Adhulam”.

Antes de que se diera a conocer el sentido de la sentencia, el abogado particular de la iglesia atacó a la Fiscalía General del Estado (FGE) de pretender montar un escenario para fabricar un delito en agravio de su cliente, pues insistió que en la declaración de la madre y hermana, realizada el pasado lunes, ambas cayeron en una serie de contradicciones.

“Además hay que recordar la declaración de la psicóloga de la Fiscalía, quien dijo que la menor no presenta ninguna afectación psicológica y moral”, indicó en sus argumentos el abogado Gerardo Reyes, quien además se quejó del peritaje médico que señala una ligera lesión en el cuerpo de la adolescente, pero 27 días después de los hechos, lo que –dijo– “es inverosímil”.

El juez redactor de la sentencia, Arturo Ampudia Amaro, dijo que el tribunal le dio credibilidad a la declaración de la menor porque la misma parece no estar manipulada, y narró que fue en tres ocasiones que el pastor abusó sexualmente de ella diciéndole frases como “los ángeles podemos meternos con los hijos de los hombres”. Y en otra ocasión, al besarle el abdomen, le dijo “que eso era la cosa más hermosa porque le permitía al hombre reproducirse”.

En sus alegatos, la defensa de Rodrigo “N” indicó que la agente del Ministerio Público no logró comprobar que su cliente fuera pastor de la iglesia, ya que eso significaría un agravante en la comisión del delito.

El juez indicó que para el tribunal quedó claro que sí tenía un peso moral para los feligreses, pues los adolescentes lo llamaban “apá”.

Además, indicó que los peritos que estuvieron involucrados en el juicio oral acreditaron la comisión del delito.

Mientras tanto, la madre y la hermana de la víctima declararon que el abuso sexual fue cometido en mayo y junio de 2014, en el interior del templo, el cual está ubicado en la calle 21 de Noviembre de la colonia Ricardo Flores Magón.

Además, señalaron que la menor no quería hablar sobre el abuso del que fue víctima, pero el cambio de su conducta era notario, hasta que decidió hablarle a su madre de lo sucedido.

Finalmente, la presidenta del tribunal que conoce del caso citó a las partes para el próximo 15 de octubre, a las 10 de la mañana, a fin de dar a conocer el número de años que el hombre tendrá que permanecer en prisión.