El sábado pasado los trabajadores convocaron a una asamblea general extraordinaria para exigir a Millán Toledo dejar la dirigencia, porque había fenecido su periodo al frente del sindicato y no lo querían más al frente de la organización.

Jesús Millán Toledo, quien se ostenta aún como secretario general del sindicato, había sido electo por tres años y luego se “reeligió” por un año más. El año pasado, sabiendo que concluía su periodo, en completo sigilo promovió ante el TECA un recurso para solicitar la “ampliación de funciones” y la entrega de la toma de nota para continuar al frente del sindicato hasta el 7 de julio de 2012.

Sin embargo, el 25 de noviembre de 2011 el TECA en el expediente 11/03/59 resolvió improcedente la solicitud y desde entonces Millán Toledo no sólo debió dejar la dirigencia, sino convocar a elecciones para renovar el comité ejecutivo del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Judicial, pero optó por ocultar la información, continuar como secretario general e incluso firmar el pasado 2 de abril el convenio laboral de aumento salarial en calidad de secretario general de la agrupación y representante de los sindicalizados.

Los trabajadores al darse cuenta del engaño y que la dirigencia sindical estaba legalmente acéfala, citaron hace unos días a una asamblea extraordinaria para convocar a elecciones, pero Jesús Millán sin éxito intentó convencer a los trabajadores para mantenerlo al frente del sindicato.

Debido a la presión de los trabajadores sindicalizados, se integró el comité electoral y se prevé que el próximo lunes se haga la convocatoria para la inscripción de planillas que competirán y el 7 de julio realizar elección de los nuevos dirigentes del comité directivo del sindicato.