“Yo no voy a cobrar sueldo, porque creo que la posición de alcalde debe asumirse con convicción, con coherencia y con compromiso por la ciudad y su futuro, yo quiero que ese recurso que cobra el alcalde sea destinado para apoyar causas sociales y de beneficio comunitario”, aseveró.

De este modo, mencionó que poco más de un millón de pesos que ganaría al año como alcalde lo donará para la realización de proyectos de beneficio para los habitantes de Cuernavaca y que se haga presente a organizaciones que cuenten con el registro correspondiente.

“Yo estaría dispuesto a dar tres años de mi vida a cambio de dejarle un mejor lugar a nuestros hijos y no sólo para ellos, también para todos nosotros. El hecho de no cobrar como alcalde no es un sacrificio; por el contrario, el hecho de destinar el sueldo para obras sociales es en realidad una inversión a largo plazo, porque yo quiero quedarme a vivir siempre en Cuernavaca y quiero que tengamos una ciudad limpia, digna, con buenos servicios, desarrollo y oportunidades para todos. Porque si a Cuernavaca le va bien, pues a todos nos va mejor”, declaró.

Explicó que desde joven su familia le inculcó el valor del trabajo y la manera en la que hay que obtener el sustento sin necesidad de vivir del erario público y por ello quiere trabajar por Cuernavaca con una visión ciudadana y no por una ambición política ni económica.

“Es una cuestión de responsabilidad con la ciudad en donde vivo, donde está mi familia, donde quiero envejecer y a la que quiero ayudar, como ciudadanos podemos quejarnos del atraso que vivimos en la capital de Morelos, o involucrarnos directamente en hacer de nuestra ciudad el lugar que anhelamos”, refirió.