Este viernes, finalmente fueron cuatro los que se apuntaron para competir en las encuestas y ser el candidato del sol azteca y aunque los aspirantes reconocieron que no entregaron resultados de exámenes antidoping, como fue el acuerdo del Consejo Estatal, la mayoría se dijo dispuesta a aplicárselos en las siguientes semanas.

Incluso, dijeron que es necesario que todos los partidos políticos obliguen a sus contendientes a cumplir con dicho requisito, además de presentar un informe de la situación patrimonial de cada uno para garantizar que todos los participantes del proceso electoral son honestos y no existe ningún vínculo con la delincuencia organizada.

Es que Mario Rojas Alba, quien también se registró como precandidato del PRD a la gubernatura, señaló directamente a dos de sus contrincantes por un posible mal uso de los recursos para promocionar su imagen en los últimos meses.

El activista dio el nombre del senador Graco Ramírez Garrido Abreu y del diputado local Rabindranath Salazar Solorio. De ahí que, afirmó, el partido debe tener un control del patrimonio de cada uno de los candidatos para garantizar que cada uno patrocine su campaña con recursos propios.

“Funcionarios corruptos que reciben altísimos sueldos. Y no vamos a permitir eso. Tenemos que hacer todos un trabajo político que regrese la dignidad, que permita honestidad. El que quiera hacer dinero, enriquecerse que se vaya a hacer otras cosas”, declaró.

En lo que debieron haber cumplido también los precandidatos del PRD es en entregar información patrimonial, pues también era un requisito.