La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) intensificó las medidas de control en el primer cuadro de la Ciudad de México ante la marcha convocada por la denominada Generación Z.

Esta mañana se instalaron barricadas de concreto en los accesos principales al Zócalo, complementando las vallas metálicas que ya se encontraban en la zona.

En calles como 16 de Septiembre, los muros se extendieron de extremo a extremo para limitar el paso tanto vehicular como peatonal.

Además, se incrementó la presencia policial, incluyendo a la unidad “Zorros”, especializada en emergencias y contención de protestas de alto riesgo.

El muro metálico que protege Palacio Nacional también fue reforzado: trabajadores soldaron secciones y añadieron cadenas y candados para evitar que sean derribadas.

La medida se intensificó tras la manifestación del jueves de integrantes de la CNTE, quienes intentaron forzar el ingreso al recinto sin éxito gracias a la acción del personal de seguridad.