El Gobierno de la Ciudad de México y los transportistas acordaron un incremento de 1.50 pesos en la tarifa del transporte público de ruta y corredor.
Las autoridades capitalinas informaron que la nueva tarifa deberá exhibirse de manera visible y permanente en los vehículos, terminales y bases de los concesionarios y permisionarios. En caso de no hacerlo, el ajuste no tendrá validez.
El gobierno señaló que el aumento está condicionado al cumplimiento de diversas medidas que buscan mejorar el servicio y la seguridad para las y los usuarios.
Entre los compromisos destacan:
Los operadores deberán contar con licencia tipo “C” vigente y visible, retirar vidrios polarizados, tener seguro de responsabilidad civil y mostrar el número de placa en la cromática de la unidad.
Se deberán realizar revisiones periódicas de luces, puertas, llantas, frenos y pasamanos, además de garantizar el correcto funcionamiento de cámaras, botones de auxilio y GPS.
Los conductores deberán portar uniforme con pantalón oscuro y camisa blanca, mantener las unidades limpias y en buen estado, y participar en programas de capacitación para mejorar la atención y seguridad de los pasajeros.
Con estas acciones, el Gobierno de la Ciudad de México busca asegurar que el aumento tarifario se refleje en un servicio más seguro, ordenado y de mejor calidad para los usuarios del transporte público.
