En la Escuela Nacional Preparatoria 8 “Miguel E. Schulz” de la UNAM, un grupo de jóvenes encapuchados cerró los accesos y suspendió las clases en protesta por una presunta agresión de la policía durante la marcha en apoyo al pueblo palestino del pasado 7 de octubre.
Los manifestantes, que se identificaron como participantes de esa movilización, explicaron que la toma busca denunciar la violencia policial y exigir justicia por un estudiante que resultó herido en los enfrentamientos.
Desde temprano, los jóvenes bloquearon las entradas con cadenas y estructuras metálicas, impidiendo el ingreso de alumnos, profesores y personal. Padres de familia intentaron abrir el plantel, generando momentos de tensión y discusiones verbales, sin registrarse agresiones físicas.
Hasta ahora, la Universidad no ha emitido un pronunciamiento sobre el incidente, que derivó en la suspensión temporal de actividades.
Este suceso se da en un contexto de creciente violencia dentro de la UNAM. La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México tiene 18 investigaciones abiertas por denuncias de falsas amenazas de bomba en distintos planteles durante menos de un mes.
Además, el pasado 22 de septiembre, un estudiante asesinó a otro con un arma blanca en el CCH plantel Sur, hecho que aumentó la preocupación por la seguridad en la institución.