El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) confirmó el domingo un nuevo caso de gusano barrenador en Sabinas Hidalgo, Nuevo León, a menos de 113 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) informó que está analizando la información relacionada con este caso y evaluará la posibilidad de liberar moscas estériles en la zona si resulta necesario.
El pasado 6 de septiembre, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció un plan de apoyo de 831 millones de pesos para productores afectados en Durango y Sonora, como medida frente al cierre temporal de la frontera con Estados Unidos por la plaga.
Chihuahua y Tamaulipas podrían sumarse posteriormente. En Coahuila, el plan prevé 700 millones de pesos, y en Sonora además de créditos se entregarán sementales bovinos a los productores.
La plaga afecta principalmente al ganado de sangre caliente, pero también se han registrado casos en humanos. El 24 de agosto, Estados Unidos reportó el primer caso en una persona procedente de Guatemala, quien recibió tratamiento en Maryland.
El gusano barrenador es causado por una mosca parásita que deposita sus huevos en heridas abiertas de los animales. Al eclosionar, las larvas se introducen en la piel, provocando infecciones que pueden ser mortales.