La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) presentó este viernes avances en la investigación sobre la explosión de una pipa de gas en Iztapalapa, accidente que dejó 10 personas fallecidas y alrededor de 76 lesionadas.
De acuerdo con los peritajes, la volcadura se originó por una ruptura en el tanque provocada por un choque con un objeto sólido, lo que ocasionó la fuga y posterior ignición del combustible.
“El tanque de gas presentó ruptura en un casquete tras el choque con un objeto sólido, lo que permitió la fuga de gas y su ignición”, precisó la fiscalía.
Las autoridades aclararon que en la zona del accidente no había desperfectos en la vialidad.
“A partir de las inspecciones que realizaron los servicios periciales, en el lugar del siniestro no se encontró ningún bache ni daños en el asfalto, lo que consta en la fijación de imágenes que documenta y preserva la evidencia visual que obra en la investigación”, detalló la Fiscalía de la CDMX.
En el sitio también se identificaron compuestos como benceno y estireno. Además, la fiscalía señaló que en las inspecciones efectuadas sobre el Puente de la Concordia no se detectaron baches ni daños en el pavimento.
Como parte de la atención a las víctimas, la Fiscalía desplegó personal en hospitales para ofrecer acompañamiento, apoyo psicológico y asesoría legal.
Por su parte, la Secretaría de Salud de la Ciudad de México informó que 54 personas permanecen hospitalizadas en distintos centros de la capital, mientras que 22 ya fueron dadas de alta.
Finalmente, se dio a conocer que la pipa siniestrada pertenece a la empresa Transportadora Silza, S.A. de C.V., la cual forma parte del Grupo Tomza.
