El boxeador mexicano Julio César Chávez Jr. salió este domingo de una cárcel federal en Sonora, horas después de que un juez de Hermosillo lo vinculara a proceso por presunta participación en la introducción clandestina de armas a México.
El juez determinó que Chávez Jr. continuará su juicio en libertad condicional, con la obligación de permanecer en el país, mientras se realiza la investigación complementaria durante los próximos tres meses.
El proceso forma parte de una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) iniciada en 2019 contra el Cártel de Sinaloa, relacionada con delincuencia organizada, tráfico de personas, armas y narcotráfico.
Uno de sus abogados, Rubén Benítez Álvarez, señaló que el boxeador será procesado por participar en la introducción ilegal de armas sin ocupar un cargo de liderazgo y rechazó los señalamientos, calificándolos de basados en “anécdotas de camaradería”.
Chávez Jr. había sido arrestado el 2 de julio en su residencia en Los Ángeles por exceder su visa de turista y proporcionar información falsa en su solicitud de residencia, pocos días después de su combate con el influencer y boxeador Jake Paul.
Tras mes y medio detenido en Estados Unidos, fue deportado a México y trasladado al Centro Federal de Reinserción Social en Hermosillo el 19 de agosto.
La investigación de la FGR incluye a 13 personas vinculadas al Cártel de Sinaloa, entre ellas Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, detenido en 2023 y extraditado a Estados Unidos.
La vida de Chávez Jr., de 39 años, ha estado marcada por diversos escándalos, incluyendo detenciones previas y problemas con drogas, mientras construía su carrera boxística a la sombra del éxito de su padre.