Una mina terrestre detonó al paso de un vehículo militar en una zona rural entre Michoacán y Jalisco, provocando la muerte de seis elementos del Ejército Mexicano y dejando a dos más gravemente heridos. El ataque ocurrió en una brecha del poblado El Santuario, en el municipio de Los Reyes, Michoacán, colindante con Jalisco.
De acuerdo con la XXI Zona Militar, los soldados patrullaban a bordo de un vehículo blindado tipo SandCat cuando ocurrió la explosión, la cual fue lo suficientemente potente para destruir por completo la unidad.
Las víctimas pertenecían a la Fuerza Especial de Reacción e Intervención (FERI), integrada a la Guardia Nacional, y al Grupo de Respuesta a Emergencias (GRE) del Ejército Mexicano.
Entre los fallecidos se encuentran el segundo subinspector Jovany Rosales Rosales y el subagente Jorge Alberto Cruz Velázquez, ambos del FERI. Las identidades de los otros cuatro militares fallecidos y los dos heridos no han sido reveladas oficialmente, aunque se sabe que hay un oficial y cinco soldados de tropa entre ellos.
La Fiscalía de Jalisco ha iniciado la investigación del hecho, mientras el Ejército realiza operativos en la zona para detectar y desactivar otros posibles explosivos.
Esta región es escenario de una intensa disputa entre el Cártel de Los Reyes y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que busca controlar las actividades ilícitas en el área.
Según informes de inteligencia, ambos grupos han incorporado a exmilitares colombianos para fortalecer sus operaciones con tácticas militares avanzadas.
El Cártel de Los Reyes está encabezado por Alfonso Fernández Magallón, alias "Poncho La Quiringüa", y Luis Enrique Barragán Chávez, alias "El Güicho", quienes mantienen vínculos con el Cártel de Tepalcatepec, liderado por Juan José Farías Álvarez, "El Abuelo Farías", exaliado de Nemesio Oseguera Cervantes, "El Mencho", líder del CJNG.