Este fin de semana, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, y su esposo, Carlos Torres Torres, confirmaron que el gobierno de Estados Unidos les revocó sus visas de no inmigrante.
La noticia fue inicialmente divulgada por Torres Torres y, más tarde, por la propia mandataria estatal a través de sus redes sociales y comunicados oficiales.
La revocación de las visas ocurre en un contexto importante, dado el papel clave de Baja California como estado fronterizo con California. Además, medios locales han destacado que es la primera vez que una persona en funciones como gobernadora de Baja California pierde su visa estadounidense.
Ávila Olmeda expresó en su comunicado que la medida afectó a su esposo primero y luego a ella, asegurando que confiaba en que la situación se resolvería de manera satisfactoria para ambos. Reiteró su respaldo a su esposo, no solo de manera personal, sino también moral y política, destacando su integridad y responsabilidad.
En estos días he sido testigo, una vez más, de lo que verdaderamente significa el amor, la entereza y la lealtad.
— Marina del Pilar (@MarinadelPilar) May 11, 2025
Mi esposo, Carlos, ha enfrentado una situación, y como en toda vida compartida, esa circunstancia también me ha alcanzado.
Poco tiempo después de la medida consular…
La gobernadora hizo un llamado a la calma y a la responsabilidad institucional, recordando a los ciudadanos que su gobierno continuará trabajando por el bienestar de Baja California, pese a este desafío. Aseguró que gobernar el estado sigue siendo un orgullo para ella y que lo hará con plena conciencia tranquila.
Por su parte, Carlos Torres Torres, quien tiene cargos honorarios en el gobierno estatal y en el Ayuntamiento de Tijuana, explicó que la revocación de su visa fue notificada por autoridades consulares estadounidenses, como parte de “disposiciones internas del Departamento de Estado”.
Torres Torres aclaró que este procedimiento no representa ninguna acusación ni investigación formal en su contra, ni por parte de las autoridades mexicanas ni estadounidenses.
El esposo de la gobernadora también comentó que está tomando asesoría legal para evaluar opciones sobre cómo proceder, como la posibilidad de reabrir el caso o iniciar una nueva solicitud de visa. Además, mencionó que la noticia ha sido divulgada con responsabilidad para evitar especulaciones o el uso político de la situación por parte de sus adversarios.
Hasta el momento, el gobierno de Estados Unidos no ha explicado las razones específicas de la revocación de las visas ni si esta medida tendrá otras repercusiones legales o diplomáticas.