De acuerdo con fuentes de la ronda de Ocotepec, la mujer que hizo la llamada fatal durante los primeros minutos del sábado pasado no pertenece a la comunidad de Ocotepec, pero visitaba con regularidad el establecimiento, y cierto día discutió con el mesero que resultó muerto en la balacera.

Así mismo, no obstante que los propietarios del negocio habían sido extorsionados aproximadamente hace un mes y medio y se negaron a pagar, al parecer este ataque no fue producto de la negativa, sino más bien de la discusión que sostuvo la mujer con las personas ahí reunidas.

Por otra parte, según fuentes de la Policía Ministerial, el bar “Chuy” seguirá cerrado indefinidamente a fin de que las investigaciones necesarias en el establecimiento se lleven a cabalidad.

Además, de las 11 personas que resultaron heridas en el ataque, cuatro continúan internadas en el Hospital General “José G. Parres”, tres estables y una grave.

Mientras tanto, aún se puede observar que el lugar sigue acordonado por las cintas que la Policía Ministerial puso para resguardarlo, así como las marcas con que fueron fijados los casquillos encontrados a las afueras del bar, lo cual contrasta con las flores ahí dejadas por los deudos en recuerdo de sus familiares fallecidos.