En entrevista con La Unión de Morelos, los responsables del grupo refirieron que los 14 internos privados de su libertad retornaron a sus respectivas casas tras ser obligados por dos hombres armados a desalojar el inmueble.

Uno de los entrevistados que pidió la reserva de su nombre narró que la noche en que ocurrió el hecho, dos personas tocaron a la puerta del centro de rehabilitación ubicado en la colonia Ampliación Lázaro Cárdenas de Cuernavaca con el pretexto de que iban a internar a un hombre.

Sin embargo, los sujetos amagaron a los tres responsables del lugar y los despojaron de las llaves para posteriormente ingresar al área de dormitorio, en donde obligaron a los internos a desalojarlo, refirió el entrevistado.

Los agresores arremetieron a golpes contra un joven con discapacidad mental al tiempo que amenazaron con quemar a otros dos para que también les entregaran algún dinero.

“Órale, vámonos todos, hijos de su…”, refirió uno de los delincuentes que es identificado como Iván García, quien hace seis meses había ingresado a “La Fortaleza” pero posteriormente fue sacado de manera similar por otras personas armadas.

“Algunos de los internos iban a salir en unos días y otros acababan de llegar por problemas de adicción para permanecer tres meses y lograr recuperarse de las drogas o el alcohol”, declaró otro de los responsables.

Luego de que evacuaron el área del dormitorio, los delincuentes prendieron fuego a las camas y huyeron en compañía de los internos al tiempo que amenazaron con regresar.

Ante esta situación, los responsables del centro de rehabilitación informaron que iniciaron una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado por los daños.

“Las instalaciones tienen funcionado 13 años pero el grupo va a cumplir 18 años el primero de enero”, refirió uno de los entrevistados que se mostró optimista para reconstruir el centro.

Un joven testigo del trabajo que realiza el personal dijo: “Éste es uno de los grupos que respeta la integridad física y humana de los internos. No hay otro grupo que trabaje como éste. A mí me ayudaron y estoy muy agradecido por eso”.

Sobre la situación de los internos que fueron obligados a salir del inmueble, los responsables revelaron que sus familiares se comunicaron con ellos para informar que todos habían regresado sanos y salvos a sus casas.

“La mayoría borrachos o drogados, pero al fin y al cabo se encontraban bien”, refirió un entrevistado.