Al menos cinco agentes de policía fallecieron este viernes en un ataque contra dos vehículos de las fuerzas de seguridad en la provincia de Sistán y Baluchistán, en el sur de Irán.
El incidente ocurrió en la zona de Daman, en la ciudad de Iranshahr, cuando un grupo armado abrió fuego contra los vehículos, según informó la agencia oficial IRNA.
Tras el ataque, los responsables huyeron y las autoridades iraníes iniciaron operaciones para capturarlos.
La región, con mayoría de población suní, es escenario frecuente de enfrentamientos entre el gobierno chií de Teherán y grupos extremistas, así como de bandas de contrabandistas y narcotraficantes.
Entre estos grupos se encuentra Yeish al Adl, catalogado como terrorista por Irán, que busca la independencia de la zona.
Este grupo reivindicó recientemente la muerte de un policía en Iranshahr. El sábado siguiente, las fuerzas de seguridad informaron del abatimiento de seis presuntos miembros de la organización durante operaciones en la región.
La provincia ha sido escenario de ataques recurrentes: a finales de julio, cinco personas murieron en un asalto al edificio de Justicia de Zahedán, y el año pasado, Yeish al Adl realizó ataques coordinados contra cuarteles de la Guardia Revolucionaria y comisarías de policía, causando al menos treinta muertos, diez de ellos agentes.