Al menos siete personas murieron y varias decenas resultaron heridas tras el descarrilamiento de un tren de pasajeros en la región rusa de Briansk, luego del colapso de un puente ferroviario el sábado por la noche. El convoy, que viajaba con 388 pasajeros de Klimov a Moscú, se accidentó en el distrito de Vygonichskyi, cerca de la frontera con Ucrania.
Horas después, un segundo puente colapsó en la región de Kursk, provocando la caída de un tren de carga sobre una carretera. Las autoridades informaron que uno de los maquinistas resultó herido y fue hospitalizado junto a su equipo.
Inicialmente, autoridades rusas señalaron que los incidentes fueron causados por explosivos y calificaron ambos hechos como posibles atentados. Sin embargo, horas más tarde modificaron su versión oficial, limitándose a decir que las estructuras colapsaron sin confirmar aún la causa.
El Comité de Investigación de Rusia y varios funcionarios locales manejaron la hipótesis de sabotaje. El gobernador de Briansk afirmó que la caída del puente fue producto de una "voladura". También se informó que 47 personas fueron hospitalizadas, entre ellas tres menores, uno en estado grave.
Medios rusos y canales en Telegram, algunos vinculados a fuerzas de seguridad, sostienen que se colocaron explosivos en los pilares y las vías del puente. Aunque no hay pruebas concluyentes, algunos funcionarios y comentaristas responsabilizaron directamente a Ucrania, mientras que Kiev ha negado su implicación y ha sugerido que podría tratarse de un montaje del Kremlin.
La tragedia ocurre en un contexto de tensión creciente entre ambos países y en vísperas de una posible reunión entre delegaciones de Rusia y Ucrania en Estambul. Desde el inicio del conflicto en 2022, las regiones rusas fronterizas con Ucrania han sido blanco de ataques frecuentes, incluidos bombardeos y sabotajes.
El presidente Vladimir Putin mantuvo su agenda este domingo, aunque sostuvo una breve llamada con el gobernador de Briansk y el director de la compañía ferroviaria estatal. Las labores de rescate continuaron durante toda la noche con el apoyo de más de 180 efectivos.
La investigación sigue abierta y las autoridades aún no han confirmado oficialmente la causa del colapso de las estructuras.