Desde temprana hora personal militar y de logística del Gobierno Estatal supervisó lo que será el recorrido de la parada cívico-militar, la cual partirá desde la calle Miguel Negrete en la colonia Miguel Hidalgo hasta terminar en la Plaza Revolución del Sur.

El dispositivo estará a cargo de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), el Ejército Mexicano, Protección Civil estatal y municipal, apoyados por paramédicos y brigadas de voluntarios.

A lo largo del trayecto serán colocados siete puntos de atención de emergencias con igual número de ambulancias, un Centro de Triage en Cuautlixco para la atención de personas que pudieran resultar afectadas en su salud, ya sea por el sol o por algún incidente.

La Dirección Municipal de Protección Civil estableció seis salidas de emergencias en igual número de calles, las cuales han sido señalizadas a efecto de evitar que la multitud las tape. Estas serían utilizadas por las ambulancias y cuerpos de emergencias en caso necesario.

Antes de iniciar el desfile, los contingentes estarán formados en la calle Miguel Negrete. En la logística se establecen los lugares de deberán ocupar los agrupamientos militares, los contingentes escolares y las asociaciones de charros a caballo, los cuales irán al último. Cada agrupamiento estará a cargo de un funcionario municipal o algún elemento de la Policía Municipal, tránsito, brigadas voluntarias o de Protección Civil para atender lo más pronto posible alguna eventualidad.

También se establecerá un puesto de atención por parte de la Cruz Roja Mexicana, la cual instalará un tráiler en la Alameda, el cual contara con consultorios y todo el equipo necesario para atender emergencias. Se espera que el tradicional desfile con el que se conmemora el natalicio del Siervo de la Nación tenga una duración máxima de hora y media.

Con ello se pretende evitar incidentes como el del año pasado, cuando un caballo se salió del control de su jinete y desbocado lesionó a alrededor de 60 personas, de las cuales una de ellas, la profesora Margarita Hernández García de 48 años y oriunda de Veracruz, perdió la vida cuatro días después.