En tal sentido se manifestó  el secretario suplente de la Casa Ejidal de Tetelcingo, Pedro Baizano Tlatelpa, quien señaló que “a estas condiciones se suma también un rechazo de las nuevas generaciones a usar el chincuete, lo cual sucede por pena de las jovencitas”, explicó.

Destacó que “este vestuario es caro, viene costando 600 pesos el metro de tela y por eso la señoras ya no tienen  para comprar, no les alcanza y dicen: ‘Mejor me compro un vestido que viene costando entre 70 y 200 pesos’”.

En lo personal, agregó, “mi madre usa esa vestimenta y se les está comprando esa ropa porque no queremos que se pierda esa tradición; queremos que sigan usando el chincuete, nosotros, que es una de las tradiciones que distingue a nuestra gente”, subrayó.

En relación con la lengua nativa de esta comunidad, el náhuatl, comentó que “se está difundiendo; incluso hay clases en el centro ceremonial, donde a través de equipo de cómputo, se dan clases para que los niños no pierdan esa tradición, nuestra lengua indígena; que la hablen tanto en las escuelas, pero igualmente se está difundiendo en la propia etnia, para llevar a cabo un rescate con éxito”, finalizó.