Titular afirma que la situación ocurrió durante su ausencia de 62 días.

El titular de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), Juan Salazar Núñez, afirmó que durante su ausencia al frente del organismo desaparecieron varios expedientes y por ello se inició una investigación interna, cuyos detalles mantuvo en reserva.

Tras la inauguración de la V Cumbre de la Convención Nacional de Fiscales Anticorrupción (Conafa), de la que Morelos fue anfitrión, admitió que en los 62 días en los que estuvo de “licencia” ocurrió la desaparición de varias carpetas de investigación que estaban en integración.

“Está investigándose, son varios los expedientes que no se encuentran, no se localizan, y existe la presunción de que fueron sustraídos”, dijo reservando toda la información sobre  qué presuntos actos ilícitos y a quiénes se investigaba en estas carpetas, por considerar que es información sensible y que corresponde a una investigación interna.

El 13 de septiembre de 2023, en medio del conflicto jurídico penal que enfrentaba y mantenía en prisión preventiva justificada al fiscal estatal, Uriel Carmona Gándara, el fiscal anticorrupción Juan Salazar Núñez solicitó licencia temporal al cargo para participar en el proceso de designación de diez magistraturas del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), convocado por el Congreso de Morelos.

Horas después, Salazar Núñez presentó su “renuncia definitiva” y el fiscal metropolitano en funciones de fiscal estatal, Carlos Montes Tello, tomó el control de la fiscalía anticorrupción y designó a Isaías Rodríguez Moreno como titular de esta institución y destituyó a varios funcionarios de la FECC, debido a que habían integrado una carpeta de investigación y solicitado una orden de aprehensión contra Carmona Gándara por el presunto delito de tortura, en grado de coautoría, en agravio de un detenido identificado como “El Diablo”.

Incluso, por este motivo el fiscal estatal permaneció varios días más en prisión preventiva y fue vinculado a un cuarto proceso penal, que ahora enfrenta en libertad.

Días después, el vicefiscal de la FECC Edgar Núñez Urquiza obtuvo una suspensión de un juzgado federal para continuar en sus funciones como encargado de despacho de esta fiscalía anticorrupción. La orden federal se ejecutó con un enorme operativo policial, apoyado por la Guardia Nacional y Ejército.

Así, durante dos meses, prevaleció una disputa por el control y la titularidad de la FECC y fue hasta el 14 de noviembre cuando Juan Salazar Núñez retomó la titularidad de la fiscalía -por no ser legalmente válida su renuncia- y culminó el episodio.