Es perfecto para quienes buscan soluciones naturales, seguras y respetuosas con el medio ambiente.
El cempasúchil, famoso por su color brillante y su presencia en las ofrendas de Día de Muertos, también ayuda a mantener alejados a mosquitos y otros insectos. Con métodos caseros sencillos, se pueden preparar repelentes naturales sin químicos agresivos, aptos para toda la familia.
Propiedades del cempasúchil que repelen insectos
Esta flor contiene compuestos que resultan molestos para ciertos insectos, especialmente mosquitos. Su aroma intenso actúa como una barrera protectora, dificultando que se acerquen a las zonas donde se coloca. Por ello, se ha popularizado su uso en jardines, macetas y dentro del hogar, según el sitio Exmip American.
Cómo preparar un repelente casero
Para hacer un insecticida natural, sigue estos pasos:
1._ Tritura varias flores frescas de cempasúchil.
2._ Hiérvelas en agua durante 15 a 20 minutos.
3._ Deja enfriar y coloca el líquido en un atomizador.
4._ Rocía ventanas, puertas y rincones donde suelen aparecer mosquitos.
Este preparado puede aplicarse varias veces al día y es seguro para interiores, incluso cerca de niños y mascotas, evitando siempre contacto con ojos y boca.
Combinaciones con otros ingredientes naturales
Se puede potenciar el efecto agregando hierbas como citronela o romero, que además dejan un aroma agradable. Otra opción es unas gotas de aceite esencial de eucalipto para reforzar la eficacia del repelente casero.
Ventajas frente a los productos comerciales
El cempasúchil no contiene químicos agresivos, lo que reduce riesgos de irritación o alergias. Además, es económico y sostenible, aprovechando flores que normalmente se usan en decoraciones y ofrendas. Es ideal para quienes buscan alternativas naturales, seguras y amigables con el ambiente.