El agua oxigenada es un producto muy utilizado en la belleza por su efecto aclarador sobre el cabello. Aplicada correctamente, puede ayudar a conseguir la tonalidad deseada, pero un uso inadecuado puede dañar las canas y el resto de la melena.

También conocida como peróxido de hidrógeno, se comercializa en diferentes concentraciones que determinan su potencia. Generalmente, se combina con tintes para lograr un color más duradero, incluso en cabellos con canas. Según el blog de Garnier, la concentración más segura y efectiva es de 20 volúmenes (20VV), suficiente para abrir la cutícula y permitir que el pigmento se fije correctamente.

El agua oxigenada de 10VV puede ser útil en cabellos finos o con pocas canas, mientras que las concentraciones de 30 o 40 volúmenes resultan demasiado agresivas y pueden dañar la fibra capilar.

Métodos alternativos para un mejor resultado

Aunque la técnica más común consiste en aplicar el tinte mezclado directamente con agua oxigenada, no siempre garantiza un acabado uniforme. Por ello, expertos de Keramix Cosmetics recomiendan dos métodos adicionales:

Técnica mordiente: se aplica agua oxigenada de 20 volúmenes sobre las canas antes del tinte para abrir la cutícula y mejorar la fijación del color.
Pre-pigmentación: consiste en colocar previamente una mezcla de tinte con peróxido de hidrógeno, logrando un tono más intenso y uniforme al aplicar el tinte definitivo.

Ambos procedimientos son especialmente útiles cuando el cabello presenta canas difíciles de cubrir.

Precauciones necesarias

El agua oxigenada puede ser una gran aliada para aclarar las canas, pero su abuso provoca resequedad, pérdida de brillo y mayor porosidad, dejando el cabello débil y frágil. Las concentraciones altas también pueden irritar el cuero cabelludo y generar resultados desiguales o tonos anaranjados.

Por ello, es fundamental seguir las instrucciones del empaque del tinte, respetar los tiempos de reposo (generalmente de 20 a 40 minutos) y evitar mezclas caseras improvisadas. Antes de aplicarlo, conviene realizar una prueba de sensibilidad para prevenir reacciones adversas.

El agua oxigenada es esencial para teñir las canas, siempre que se use con precaución. Aunque es un recurso disponible en casa, la forma más segura de lograr un acabado uniforme y saludable es acudir con un profesional.