Cada 12 de septiembre se conmemora el Día Internacional del Crochet, una fecha dedicada a rendir tributo al arte del tejido a mano conocido como crochet o ganchillo.
En distintos países, miles de aficionados y artesanos se reúnen para festejar esta tradición mediante encuentros, talleres y exhibiciones, donde elaboran prendas de vestir, accesorios y piezas decorativas con gran creatividad.
Un arte con historia
El crochet es una técnica artesanal que utiliza hilos de lana y una aguja especial —de metal, madera o plástico— para entrelazar bucles y formar tejidos. Este trabajo manual, transmitido de generación en generación, tiene raíces en culturas árabes, americanas y chinas, aunque su mayor auge en Europa se dio a partir del siglo XVI.
En la actualidad, una de las tendencias más populares es el amigurumi, un estilo originario de Japón que consiste en confeccionar pequeños muñecos tejidos con formas variadas: animales, personajes animados y figuras decorativas, entre otras.
El origen de la celebración
El Día Internacional del Crochet fue instituido en 2007 por Jim Price, un artesano estadounidense especializado en la fabricación de ganchillos de madera tallados a mano. Con esta iniciativa buscó reconocer y difundir el valor artístico de esta técnica.
Cómo se vive la conmemoración
Las celebraciones incluyen reuniones colectivas donde los participantes comparten experiencias, enseñan nuevas puntadas y exhiben sus creaciones. También se difunden imágenes en redes sociales de bolsos, carteras, calzado, adornos y prendas elaboradas con crochet, mostrando la riqueza y versatilidad de esta práctica artesanal.