Durante mucho tiempo se ha creído que el retinol no debía utilizarse en verano, debido a que podría causar manchas en la piel. Además, las fórmulas antiguas con moléculas inestables solían irritar, lo que llevó a que muchas personas lo suspendieran en esta temporada. Sin embargo, expertos en cuidado facial coinciden en que, justamente en verano, la piel necesita más que nunca este ingrediente.
Especialistas han señalado que dejar de usar retinol en verano puede interrumpir el progreso logrado durante el año.
La dermatóloga Sam Bunting explica que “detener su uso implica frenar el cuidado y luego será necesario readaptar la piel, lo que representa una pérdida de tiempo en un tratamiento que debe ser constante”.
En cuanto al efecto del sol sobre el retinol, Elisabeth San Gregorio, directora técnica de Medik8, aclara que el sol no genera una reacción dañina con este compuesto, sino que simplemente reduce su eficacia. Por esta razón, recomienda aplicarlo por la noche. Natalia Abellán, directora técnica de Ambari, añade que, si la piel ya está habituada al retinol desde el invierno, no debería haber un aumento de sensibilidad ni riesgos mayores con la exposición solar.
El uso continuado de retinoides fortalece la piel al aumentar la enzima p53, fundamental para que las células se protejan ante agresiones como los rayos ultravioleta. Por ello, expertos como Bella Hurtado, especialista de Boutijour, sugieren que la piel debe adaptarse antes del verano para mantener su barrera protectora y evitar la pérdida de hidratación.
Estefanía Nieto, directora técnica de Omorovizca, apunta que mantener el tratamiento en verano es clave para no interrumpir la rutina. Además, en esta época, la piel suele estar más grasa, especialmente en zonas de playa, por lo que la vitamina A es muy útil para controlar la producción de sebo.
El proceso de adaptación al retinol suele durar entre 30 y 45 días. No obstante, existen variantes como el r-Retinoato, diseñadas para pieles sensibles, que pueden aplicarse incluso durante el día sin causar fotosensibilidad.
Para incorporar el retinol de forma segura, los especialistas recomiendan comenzar usándolo tres veces por semana durante las primeras dos semanas, luego alternarlo días durante las siguientes dos semanas y, finalmente, aplicarlo diariamente. En contraste, el r-Retinoato puede usarse en cualquier momento sin necesidad de adaptación previa.
En definitiva, abandonar el retinol en verano no solo no es necesario, sino que puede ser contraproducente para la salud y apariencia de la piel, siempre que se utilice con precaución y siguiendo las indicaciones adecuadas.