Cuando buscas una comida casera que sea rápida, sabrosa y que guste a toda la familia, las pechugas de pollo rellenas de jamón y queso son una opción infalible.
Esta receta combina ingredientes simples con una preparación práctica, dando como resultado un platillo jugoso por dentro, crujiente por fuera y con ese toque cremoso que aporta el queso fundido.
Si no quieres complicarte en la cocina pero sí quieres lucirte con una receta que todos disfruten, esta preparación es perfecta para ti. A continuación, te mostramos paso a paso cómo hacer esta deliciosa receta.
Ingredientes:
● 2 pechugas de pollo abiertas en mariposa
● 4 rebanadas de jamón de pavo o pierna
● 4 rebanadas de queso manchego o el que prefieras
● Sal y pimienta al gusto
● 1 cucharadita de ajo en polvo
● 1 huevo batido
● Pan molido o panko
● Palillos de madera
● Aceite para freír o rociador para freidora de aire
Imagen ilustrativa tomada de Bon Viveur / Mónica Prego
Preparación:
1. Abre las pechugas en forma de mariposa (como un libro) o compra filetes delgados. Sazona con sal, pimienta y ajo en polvo por ambos lados.
2. Coloca 2 rebanadas de jamón y 2 de queso dentro de cada pechuga. Dobla y asegura con palillos para que no se abran.
3. Pasa cada pechuga por huevo batido y luego cúbrelas con pan molido o panko.
4. En una sartén con un poco de aceite, cocina a fuego medio por 5-7 minutos de cada lado hasta que estén doradas y bien cocidas. O bien, usa freidora de aire a 180°C por 15 minutos, dando vuelta a la mitad del tiempo.
Consejos para el mejor resultado:
● Usa quesos que derritan bien pero no se escapen, como manchego, gouda o mozzarella.
● Asegura bien los bordes con palillos o hilo de cocina.
● Si prefieres, hornea a 200°C por 20-25 minutos en lugar de freír.
● Deja reposar unos minutos antes de cortar para que el queso se mantenga dentro.
Este plato es ideal para acompañar con arroz, puré, ensalada o pasta ligera. ¡Pruébalo y sorprende a todos con esta receta casera rápida y deliciosa!