Los calambres son contracciones musculares repentinas, involuntarias y dolorosas, que suelen aparecer en piernas y pies, especialmente durante el ejercicio o mientras duermes.
Una de las causas más comunes es el desequilibrio de minerales como el potasio, magnesio y calcio, esenciales para el buen funcionamiento muscular. Por suerte, incluir ciertos alimentos en tu dieta puede ayudarte a prevenirlos.
Alimentos que ayudan a combatir los calambres:
Plátano
Rico en potasio, magnesio y carbohidratos. Ideal antes o después del ejercicio. Ayuda a mantener el equilibrio de electrolitos.
Espinaca
Fuente natural de magnesio, hierro y calcio. Relaja los músculos y mejora la circulación, reduciendo el riesgo de calambres.
Aguacate
Aporta potasio, magnesio y grasas saludables. También contiene vitamina E, que protege los músculos del desgaste.
Almendras
Contienen magnesio, calcio y potasio. Ayudan a la función muscular y a la recuperación tras la actividad física.
Sandía
Muy hidratante y rica en electrolitos. Su contenido en L-citrulina favorece la circulación y previene la fatiga muscular.
Si tienes calambres con frecuencia, prueba incorporar estos alimentos a tu dieta diaria. También es importante mantener una buena hidratación y evitar el exceso de esfuerzo físico sin calentamiento previo.
Con pequeños cambios en la alimentación, puedes reducir significativamente la aparición de calambres y mejorar tu bienestar muscular.