Si tu teléfono cayó al agua, no corras por arroz: este método es poco efectivo y puede empeorar el daño. Expertos advierten que actuar de forma correcta y rápida es clave para evitar que el dispositivo sufra daños irreversibles.
Ya sea por la lluvia, un descuido o un accidente doméstico, es común que el celular termine expuesto a líquidos. Sin embargo, el uso de arroz para secarlo no es la solución. De hecho, marcas como Apple y Samsung lo desaconsejan. Entonces, ¿qué hacer realmente?
Pasos recomendados si se moja tu celular
Según especialistas de Samsung, lo primero es apagarlo de inmediato para evitar cortocircuitos. Si es posible, retira la batería, la tarjeta SIM y la memoria externa. En modelos con batería integrada, mantén presionados los botones de encendido y volumen hasta que se apague.
Luego, seca bien el exterior con un paño limpio y seco. Presta atención a los conectores de carga, auriculares y ranuras. Usa bastoncillos de algodón para eliminar humedad de las zonas difíciles.
Si el dispositivo cayó en líquidos distintos al agua potable —como refrescos, agua de mar o de alberca—, desmonta las piezas removibles y enjuágalas con agua limpia durante uno a tres minutos. Después, sécalas completamente.
Deja el teléfono en un lugar ventilado y fresco, sin exponerlo al sol ni a fuentes de calor como secadoras o hornos. Espera al menos 24 horas antes de intentar encenderlo o llevarlo a revisión técnica.
¿Por qué no usar arroz?
Aunque es una práctica común, colocar el celular en arroz no solo es ineficaz, sino que puede introducir polvo o almidón en los conectores, complicando aún más su reparación. Apple y otros fabricantes insisten en evitar este método.
Alternativas más seguras
Lo mejor es usar paquetes deshumidificadores como los que vienen en cajas de zapatos o productos electrónicos. Coloca el celular en un recipiente sellado con varios sobres de estos absorbentes y déjalo entre 24 y 48 horas.
En el caso de iPhones, Apple recomienda inclinar el teléfono con el conector hacia abajo y golpearlo suavemente contra la mano para ayudar a expulsar líquidos. Después, dejarlo reposar en un espacio seco por media hora antes de intentar cargarlo.
Actuar con calma y siguiendo estos pasos puede marcar la diferencia entre salvar tu celular o perderlo por completo.