En días de calor extremo, lo primero que muchos hacen es buscar una bebida helada para refrescarse. Pero, aunque parece una buena idea, tomar líquidos muy fríos bajo altas temperaturas puede afectar tu cuerpo más de lo que crees, advierten especialistas en salud.
¿Por qué tomar algo muy frío puede hacerte daño con calor?
Cuando el cuerpo está expuesto a altas temperaturas, trabaja constantemente para mantenerse fresco: sudas, respiras más rápido y los vasos sanguíneos se dilatan para liberar calor.
Pero si de repente bebes algo muy frío:
Los vasos sanguíneos se contraen, dificultando la liberación del calor.
Puedes sudar aún más después, ya que el cuerpo intenta equilibrarse.
Si acabas de comer, la digestión se vuelve más lenta o incómoda.
Esto puede provocar malestar estomacal, mareos o fatiga, especialmente si estás deshidratado o has estado mucho tiempo al sol.
¿Mito o realidad?
No es solo un mito. Instituciones como el American College of Sports Medicine confirman que los cambios bruscos de temperatura afectan al organismo. Por eso, en regiones calurosas como el Medio Oriente o el sur de Asia, se prefiere beber agua a temperatura ambiente, porque el cuerpo la asimila mejor.
¿Qué se recomienda beber con calor extremo?
Los especialistas sugieren
Agua a temperatura ambiente o ligeramente fresca.
Bebidas con electrolitos, si has sudado mucho.
Evitar refrescos, alcohol, cafeína o bebidas azucaradas.
Comer frutas con alto contenido de agua, como sandía o melón.
Mantenerse en la sombra, usar ropa ligera y no exponerse demasiado al sol.
¿Quiénes deben tener más cuidado?
El impacto de las bebidas frías es mayor en:
Adultos mayores, que regulan peor la temperatura.
Niños pequeños, cuyo sistema aún se desarrolla.
Personas con enfermedades crónicas, como diabetes o problemas cardíacos.
Trabajadores o deportistas expuestos al sol, por el desgaste físico.
Hidratarte es clave, pero hazlo con líquidos a una temperatura moderada. Así, ayudas a tu cuerpo a mantenerse fresco sin forzarlo a compensar un cambio brusco. En el calor, una bebida muy fría puede parecer la solución, pero podría empeorar cómo te sientes. Mejor dale a tu cuerpo lo que necesita: agua fresca y estable.