Apple estaría considerando un movimiento inesperado para impulsar la nueva versión de Siri, cuyo lanzamiento se ha retrasado hasta 2026.

Según el periodista Mark Gurman de Bloomberg, la compañía inició conversaciones con Google para adoptar Gemini, su inteligencia artificial generativa, como base tecnológica del asistente virtual.

Aunque las negociaciones aún se encuentran en una fase inicial, trascendió que Apple fue quien se acercó a Google con la propuesta. Incluso, se reporta que en Mountain View ya se estaría entrenando una versión personalizada de Gemini capaz de operar en los servidores de Apple.

No obstante, todavía no hay una decisión definitiva, y la compañía también evalúa alternativas como Claude (de Anthropic) o ChatGPT (de OpenAI), además de continuar desarrollando sus propios modelos internos.

El retraso de Siri ha puesto en evidencia los desafíos de Apple en el campo de la inteligencia artificial. Craig Federighi, jefe de software de la empresa, reconoció que los problemas surgieron por el desarrollo simultáneo de dos arquitecturas distintas: la primera no cumplió con los estándares esperados y la segunda no estuvo lista a tiempo.

Esto derivó en una reestructuración del equipo, ahora bajo la dirección de Mike Rockwell, responsable de las Apple Vision Pro.

La situación se ha visto agravada por la fuga de talento hacia competidores como Meta, incluida la salida de Ruoming Pang, exjefe de modelos fundacionales de la manzana.

Además, decisiones internas, como el veto de Federighi a liberar parte de la IA de Apple como código abierto, han generado malestar en el equipo y afectado la moral de sus investigadores.

De momento, se espera que Apple tome una determinación en las próximas semanas.

Aunque la nueva Siri no debutará sino hasta 2026, se prevé que durante la presentación del iPhone 17, programada para el 9 de septiembre, y del lanzamiento de iOS 26 una semana más tarde, la compañía ofrezca novedades sobre el estado de su asistente virtual.